Con una marcha de antorchas, la comunidad universitaria se movilizó contra “un brutal ajuste”
Personal docente, no docente, estudiantes, gremios de la ciudad e investigadores del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (Conicet) se movilizan desde la Plaza San Martín hasta la 25 de Mayo en contra del veto de Javier Milei a la Ley de Presupuesto Universitario y por salarios dignos.
Cientos de estudiantes, profesores y trabajadores no docentes de la Universidad Nacional de Rosario (UNR) se movilizaron este miércoles desde la plaza San Martín hasta la 25 de Mayo en una marcha de antorchas que demandó diversas mejoras al sistema universitario.
Salarios docentes y no docentes, ciencias e investigación y recursos para el funcionamiento de las universidades formaron parte de la agenda que la comunidad educativa incluyó en la movilización, que tuvo como contexto un paro por 24 horas de los sindicatos que agrupan a profesoras y profesores del nivel superior.
“Traigan al gorila de Milei, para que vea, que este pueblo no cambia de idea, pelea y pelea por la educación”, cantó la columna liderada por estudiantes y miembros de Coad, el sindicato docente, que transitó el centro de Rosario detrás de una bandera que incluía las tres demandas principales de la movilización: aumento del presupuesto; salarios dignos y “no al cierre del Conicet”.
“Lo que se está produciendo es un vaciamiento de la universidad, con la excusa de que es reemplazable, que no tiene sentido de ser”, dijo a Conclusión un alumno terciario, que se sumó a la marcha.
“La movilización de hoy -continuó- es esencial porque es en defensa de le educación pública, pero sobre todo contra su privatización, contra el desfinanciamiento y con el reclamo central, que no tenían las otras marchas, que es el salario docente”, abundó.
Prevista para las 18, la columna que se extendió a lo largo de cuatro cuadras comenzó a moverse media hora después. Un estudiante y militante de la agrupación Alde dijo a Conclusión que participó de la “marcha de las antorchas porque la educación pública hay que defenderla. Lejos de lo que quiere instalar el Gobierno nacional, estamos viviendo un brutal ajuste al financiamiento, a los salarios y a las becas”.
Consideró que el Gobierno, tras la marcha federal del “23 de abril, tuvo que dar un aumento”, lo que “demuestra que las balas le entran, que hay cosas que le molestan realmente”. Por eso, sostuvo que “el camino es este, encontrarnos y ser cada vez más para seguir luchando por la Argentina que necesitamos”.
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Una sola causa
Una docente provincial jubilada que también participó de la marcha de las antorchas convocada por la comunidad universitaria, explicó que se unió a la protesta “para acompañar a los estudiantes”.
“La causa de los estudiantes, como la de los jubilados y todos los trabajadores, tienen que ser una sola”, dijo, al entender que “sólo la unión de todos los que luchamos puede dar vuelta este plan terrible del gobierno de Milei”.
“No es una cuestión personal, es una posición política: solamente con la movilización y la unidad de todos los que luchan podemos dar vuelta este plan terrible del gobierno nacional”, insistió.
En la plaza San Martín, antes del inicio de la marcha, un docente le dijo a Conclusión que “lo que más me convoca, además del desfinanciamiento, es el ataque que hay desde el Poder Ejecutivo hacia la comunidad educativa toda, no solo la universitaria”.
“Se nos desprestigia, se nos maltrata. En un proyecto de país al que uno aspira, nuestra función, la de los educadores, es muy importante y creo que, como cualquier otro trabajador, merecemos ser reconocidos y que nuestro trabajo sea valorado”, añadió Juan.
A su lado, otro profesor e investigador del Conicet, sostuvo que “hay un objetivo muy claro de destruir lo que sea público y estatal”.
“Soy investigador del Conicet y veo que hay un ataque para desguazar los distintos organismos y, después, hacer como están haciendo con Aerolíneas: la desfinancian y, cuando no funcionan, dicen que hay que privatizarla”.
