Coronavirus en Rosario: alarma por aumento del contagio adolescente
Las autoridades sanitarias se mostraron alerta en relación al aumento casos registrados en la población adolescente, una situación que vinculan al regreso de los viajes de estudio.
- Ciudad
- Mar 19, 2021
El secretario de Salud municipal, Leonardo Caruana, aseguró este viernes que el operativo de vacunación avanza al máximo ritmo posible. El principal escollo es el enlentencimiento de la llegada de vacunas, un problema que reconoció como «nacional y mundial». Si la recepción de dosis iría a la par de la demanda, la Municipalidad tiene capacidad para atender 10 mil turnos semanales. A la par de esta situación, las autoridades sanitarias comenzaron a registrar un incremento de los contagios en adolescentes, suba que vinculan al regreso de los viajes de estudio.
«Tenemos mucha mayor disponibilidad para poder vacunar, pero depende de la asignación de turnos y el acceso a la vacuna, que registra claramente un enlentecimiento. Este es un problema nacional, pero también mundial», señaló este viernes el funcionario municipal.
Ante consultas por la entrega de turnos a personas de distintas edades anotadas para vacunarse en los centros de distrito, Caruana aclaró que «la gestión, el acceso y la asignación de turnos para la vacunación es del Ministerio de Salud de la provincia» y desde el ámbito local se aporta «la descentralización mayor de la campaña para que no sea La Rural el único punto».
Igualmente, el titular de la Secretaría de Salud indicó que el principal escollo de la campaña no está relacionado a la cantidad de turnos y su gestión, sino al número de vacunas que recibe la ciudad.
«El miércoles nos entregaron 2.000 dosis de vacunación con los turnos asignados y hoy a la tarde estamos terminando, salvo que haya alguna situación de ausentismo. Van a quedar escasas vacunas y todo lo que nos entregan lo usamos para vacunar. Si nos entregan más vamos a tener mayores posibilidades, hasta un número de 10 mil turnos semanales»», detalló.
Brasil como amenaza
Al funcionario municipal también le preguntaron cuál es el grado de preocupación local ante la posible aparición de una nueva cepa en Rosario, particularmente proveniente de Brasil, cuya variable de Manaos tiene mayor contagiosidad y letalidad.
«La preocupación que tenemos como ciudad y que se tiene en el país es justamente la crisis sanitaria y la evolución en los países limítrofes. Dentro de los cuatro países (Paraguay, Uruguay y fundamentalmente Chile) Brasil se lleva el mayor número de contagios y también cambios en las mutaciones. Hoy no tenemos ninguna confirmación oficial (de la presencia de la variable en la ciudad)», respondió Caruana.
El secretario de Salud sí confirmó que han enviado muestras para que sea estudiado el genoma del virus en algunos casos, pero todavía no han recibido ninguna confirmación oficial de que el contagio evaluado esté vinculado a una de las cepas extranjeras. «Más allá de eso, la situación es que ninguno de estos virus atraviesa el barbijo ni es resistente al alcohol», resaltó.
«Por esas cosas -continuó Caruana- hay que seguir cuidándose como lo estamos planteando. La evolución sanitaria en lo local sigue las curvas que sigue la Argentina. En ese sentido, hay que priorizar la no relajación, porque justamente la vacuna sigue siendo más lejana en relación a cambiar la inmunidad colectiva».
Adolescentes relajados
Uno de los puntos en los que hicieron foco las autoridades sanitarias es el aumento de los contagios en la población adolescente. Un rasgo que -consideran- puede vincularse a los viajes de estudio y el aumento de la circulación que esa actividad genera.
«Cuando uno mira la tasa de contagios, en el sector adolescente se ha incrementado entre un 10 y un 15 por ciento con respecto al resto de las poblaciones. Eso es atribuible a las vueltas de los viajes de estudio», especificó Caruana.
Sobre la posible restitución de algunas restricciones para restringir la movilidad de la población, el secretario de Salud aseguró que evaluarán a diario el escenario epidemiológico y se avanzará en función de una situación que, dijo, aun no puede calificarse de «grave».
«Sí estamos en un semáforo amarillo porque la ocupación de camas sigue estando dentro de lo habitual. La evolución de los indicadores sanitarios hablan de cierta preocupación. Cuando no alcanzan las responsabilidades individuales hay que ir hacia otras definiciones, que hoy tienen que ver con desalentar los viajes, seguir con las limitaciones de viajeros extranjeros, y el aislamiento estricto de las personas que ingresan de viajes de estudio, ya sea de afuera del país o de otras provincias», explicó.