Gimnasios abiertos: «Estamos felices pero con incertidumbre por el futuro»
Así se expresó sobre la reapertura de los establecimientos para la actividad física Julia Fourcade, dueña de un local que lleva once años en el centro rosarino y que espera poder renovar su contrato que vence en julio.
Los gimnasios volvieron a abrir sus puertas en la ciudad de Rosario, de acuerdo al protocolo implementado por el municipio, lo que les da un respiro luego de más de ochenta días cerrados por el aislamiento que causó la pandemia de coronavirus.
Julia Fourcade, dueña de un gimnasio que lleva once años en el centro rosarino y que brinda rutinas aeróbicas personalizadas, pilates y diversas clases, analizó en una entrevista de Conclusión la situación de los establecimientos para la actividad física.
«Estamos muy felices por poder abrir, al igual que la gente que viene, pero con mucha incertidumbre por el futuro, que esperemos resulte bien. Lo importante es que los clientes acataron muy bien el protocolo, a pesar de venir con barbijos o máscaras», expresó.
Fourcade apuntó que «la situación de volver a abrir después de ochenta días alivia un montón, no solo económicamente sino para la cabeza, porque no es lo mismo dar una clase frente a la pantalla que estar adelante. Alivia al bolsillo pero también al alma».
Sobre los protocolos implementados, opinó: «Hay varios puntos a tener en cuenta, venir y mantenerse con el tapabocas durante el ejercicio, completar un protocolo con los datos personales y preguntas sobre síntomas, a firmar comprometiéndose con la verdad».
Sin embargo, reconoció que «el uso del tapabocas durante el ejercicio complica bastante, estamos trabajando un poco más pausado y si no tienen a nadie cerca pueden destaparse un poco la nariz. Es difícil trabajar por la hipoxia que produce, pero hasta que no se diga lo contrario tenemos que seguir al pie de la letra el reglamento».
«El gimnasio se está manejando con turnos previos por las redes sociales y la cantidad de gente depende de la capacidad disponible, que en nuestro caso es de 25 o 30 personas, se reduce siempre a la mitad, o sea que contamos con máximo de 10 permitidos», agregó.
La dueña del gimnasio que en julio vence contrato y espera poder renovar sin complicaciones, terminó diciendo que «por suerte la demanda es mucha, no me alcanza el día para responder la cantidad de mensajes que tengo. El gimnasio está bastante tranquilo, esperemos acomodar bien los horarios y los turnos, hay que acostumbrarse a venir más temprano porque el horario actual es de 7 a 19».