Improvisación en las bicis municipales: ni casco, ni luz
El concejal Diego Giuliano dialogó con Conclusión y se refirió a una “contradicción normativa muy profunda” con respecto al tema. Además, abogó por la gratuidad del sistema de bicicletas públicas.
- Ciudad
- Mar 31, 2016
En el marco de las polémicas alrededor de la nueva tarifa que comenzará a regir a partir del viernes para Mi Bici Tu Bici, el sistema de bicicletas públicas, Diego Giuliano, concejal del Bloque Federal y presidente de la Comisión de Seguridad Pública y Comunitaria, dialogó con Conclusión para referirse al tema. Además, disparó contra la ausencia de cascos y la falta normativa que eso constituye.
“Nosotros queríamos que, finalizado el período de prueba, la gratuidad se extienda durante todo el año, hasta tanto el Municipio pueda conseguir los sponsors que puedan darle al sistema una mayor universalidad y gratuidad. Lo pedimos el año pasado, pero no obtuvo el consenso por parte del oficialismo”, reconoció el edil.
Asimismo, Giuliano disparó contra una “contradicción normativa muy profunda” relacionada a la falta de cascos de las famosas bicicletas naranjas. “Hay una ordenanza en la ciudad que obliga al uso de cascos. Por lo tanto, hay que cumplirla… o cambiarla. Lo que no se puede hacer es violarla”, aclaró el abogado y profesor de Derecho Constitucional.
“El mismo que te proporciona la bicicleta, te debe proporcionar un casco. Hay una contradicción muy grande. A no ser que el Municipio haya hecho algún estudio que indique que a partir de ahora no son más necesarios los cascos en la ciudad de Rosario”, lanzó el edil.
A su vez, Giuliano puntualizó que “nosotros no podemos hacernos cargo de una contradicción normativa de este tamaño, sobre todo cuando el mismo que te obliga a usar casco, te da una bicicleta sin casco”.
¿Y qué ocurriría en caso de un accidente? “Habría que analizar el sistema de responsabilidades, porque acá hay un contrato de adhesión que firma el usuario antes de subirse a una bicicleta pública. En principio, en caso de accidente, tendrían los mismos efectos que rigen para los transportes públicos. Los contratos de adhesión cuentan con un seguro. Sobre todo a partir de la falta de gratuidad: si pagás una tarifa para subirte a una bicicleta, que no es tuya sino pública, hay un contrato de adhesión. Pero habría que profundizarlo más el tema”, concluyó Giuliano.