Nuevos atentados al transporte: atacaron dos colectivos y choferes realizan otro paro
Horas después de que los choferes hayan cortado el servicio por una nota amenazante dentro de una unidad, dos vehículos fueron atacados, uno de ellos recibió impactos de bala. La UTA resolvió el cese de actividades.
Rosario no tiene paz. Es que los ataques por parte de grupos delictivos continúan en la ciudad. Luego de la amenaza a un colectivo en la mañana de este lunes, finalmente la advertencia se concretó -una vez más-, ya que dos unidades fueron agredidas violentamente en la noche de este lunes.
A raíz de estos hechos, la UTA Rosario definió un nuevo corte del servicio desde las 22.30 de este lunes. Por lo tanto, según confirmaron desde la entidad gremial, el martes no habrá colectivos en Rosario.
Colectivo de la línea Expresso baleado en la noche del lunes
En primer lugar, el interno 3048 de la línea Expresso recibió impactos de bala mientras se encontraba circulando en la zona sur de Rosario, en las cercanías de calle Beruti entre Dean Funes y Abanderado Grandoli.
Por su parte, el interno 4527 de la línea 143 de la empresa Rosario Bus también recibió impactos en uno de los vidrios, que hasta la noche del lunes se intentaba determinar si eran producto de balas o piedrazos. Este episodio ocurrió en las inmediaciones del casino CityCenter. Tampoco se registraron heridos.
A su vez, choferes de colectivos también denunciaron a la policía que recibieron amedrentamientos mediante fotos de notas amenazantes, como fue el caso de un conductor de la línea 110.
En la jornada de este lunes se había producido un corte del servicio de colectivos por una amenaza a uno de los coches, que se prolongó desde la mañana hasta cerca de las 16.
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La nota fue hallada en un vehículo de la empresa Movi, el cual se encontraba en la puerta del galpón donde se guardan los vehículos. Tras esto, los choferes dispusieron el cese del servicio de forma preventiva y volvieron a punta de línea. Horas más tarde, el funcionamiento se retomó, pero cerca de las 22 se reanudaron los ataques.
Este hecho se suma a varios de similares características en los que unidades del transporte público son blanco de ataques. El suceso más trágico tuvo lugar el pasado 7 de marzo cuando Marcos Daloia, de 39 años, fue asesinado cuando se encontraba desempeñando su labor. El hombre permaneció grave en el Heca durante tres días, hasta que finalmente murió.