Operativo de limpieza en Los Pumitas para retirar escombros de las casas destruidas en la pueblada
Los trabajos se realizan en el marco de una fuerte presencia de efectivos federales en el territorio. La jornada inició con unos 50 gendarmes que se reunieron a las 7 en una cancha de futbol del barrio y luego se distribuyeron para iniciar tareas de patrullaje.
Foto: Archivo
La Municipalidad de Rosario inició este jueves un operativo de limpieza en barrio Los Pumitas para retirar los escombros de las casas destruidas durante la pueblada del pasado lunes. Las labores se llevan adelante con presencia de efectivos de fuerzas federales en la zona.
«Es un operativo que ordenó el intendente (Pablo Javkin) para limpiar después de lo sucedido. Estamos limpiando todo. Por el momento no se va a derrumbar. Si viene una nueva orden de derrumbar todo, lo haremos, pero actualmente se está sacando toda la basura de las tres casas (sobre las que inició la intervención)», explicó Oscar Vallejos, coordinador del equipo de limpieza, en declaraciones a Conclusión.
Vallejos aclaró que el número total de viviendas afectadas por la pueblada trepa a siete, pero varias de ellas son casas internas y no se puede ingresar con la maquinaria. En las jornadas siguientes intentarán entrar por los pasillos del barrio con máquinas más chicas, pero si tampoco se puede realizarán la limpieza de manera manual.
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El encargado del operativo explicó que las edificaciones no presentan peligro de derrumbe, ya que tienen estructuras firmes, y tampoco fueron afectadas las casas contiguas. Aun así, el objetivo prioritario es evitar que esos lugares vuelvan a ser ocupados.
«No queremos que vuelvan a habitar de nuevo. En un operativo que se hizo en Grandoli y Sánchez de Thompson se tumbó todo, no quedó nada. En su momento se hicieron plazas», ejemplificó Vallejos.
Operativo de seguridad
Las tareas de limpieza se dan un día después de que el Ministerio de Seguridad nacional ponga en funciones un refuerzo de efectivos federales que realizarán funciones en Rosario. Según pudo conocer Conclusión, la jornada inició con unos 50 gendarmes que se reunieron a las 7 en una cancha de futbol del barrio y luego se distribuyeron para iniciar tareas de patrullaje en la zona.
«Estamos trabajando tranquilos, con la policía y Gendarmería. Nos están custodiando. Con los vecinos tampoco hay problema, represalia, ni nada», dijo Vallejo, quien especificó que el operativo de limpieza durará dos o tres días más, salvo que tengan que tumbar las casas destruidas, lo que sumaría un par de jornadas de trabajo.
El pasado lunes, vecinos y familiares de Máximo Geres, el nene de 11 años asesinado cobardemente en un ataque a balazos en el que también resultaron heridos otros tres menores, decidieron atacar búnkers y casas de las personas que venden droga en el barrio.
Devolución a una vecina saqueada
Entre los domicilios atacados durante la pueblada, se encuentra el de una mujer, quien adujo que se trató de un error, ya que no tiene ningún vínculo con ninguna organización delictiva. La damnificada explicó que es inquilina y que posiblemente la mujer que le alquila la vivienda puede haber sido la destinaria del saqueo.
En la noche de este miércoles, un grupo de vecinos -principalmente encabezado por familiares de Máximo- se acercó hasta la vivienda de la mujer saqueada y devolvió algunas cosas que se le había sustraído.
Así lo contó Sara, vecina de la mujer, que igualmente lamentó que gran parte de lo robado no haya sido devuelto. A la vez que advirtió que la presencia de efectivos policiales en la zona no le dan ninguna garantía de paz, ya que hace escasas horas vio pasar una moto con dos personas que apuntaron en dirección a ella.
«Ante esto me quedé re sorprendida, no lo vio nadie. Tampoco comenté nada, solo observé. Seguramente es una amenaza. Pasa todo el tiempo», lamentó ante Conclusión.