Postergaron el estreno de la nueva fachada del Macro
Se reprogramó la actividad prevista para este domingo 21 de julio, a las 10, en Oroño y el río, donde comenzaría a plasmarse la pintura del edificio con la obra ganadora por concurso.
Por las malas condiciones climáticas, la Municipalidad de Rosario decidió postergar la inauguración de la nueva fachada del museo Macro, que iba a realizarse este domingo 21. La actividad se reprogramó para el domingo 28 de julio en el mismo horario.
«Paint’s not Dead» se destacará en los silos Davis por su llamativo color rosa y su técnica de pintura que simula un veteado sobre la superficie, una propuesta que combina la esencia de los métodos clásicos con una mirada moderna sobre el arte y las vanguardias.
Florencia Meucci y Manuel Cuccurell, creadores de la obra, realizarán una performance como punto destacado del proceso de concreción. La obra se lleva a cabo en dos etapas:
• Registro de la obra: tareas de impermeabilización y fondeo, seguidas de la aplicación de una base de pintura sobre toda la superficie.
• Chorreado: a partir del 28 de julio a las 10 horas se aplicará la técnica de chorreado para dar vida al diseño ganador, impregnando la fachada del Macro en color rosa y su característico veteado.Un ícono cultural de la ciudad
La pintura exterior del Macro trascendió su función estética para convertirse en un ícono cultural de la ciudad de Rosario. Su imagen se puede ver plasmada en postales, cuadernos, stickers, entre otros soportes y estampas. De esta manera, se convirtió en un símbolo artístico de la ciudad.
Desde su inauguración en 2004, la fachada del Macro fue intervenida por cuatro artistas distintos:
2004. Proyecto de la arquitecta Cintia Prieto.
2010. Diseño del trabajador portuario Martín Marcos Agüero.
2017. Propuesta de los arquitectos Ezequiel Dicristófaro, Juan Maurino y Maite Pérez Pereyra.
2024. «Paint’s not Dead» de Florencia Ines Meucci y Manuel Cucurell (próxima a inaugurarse).
La pintura exterior del Macro tiene un carácter de obra efímera, lo que significa que cada intervención tiene una vida útil limitada. Esto se debe a las condiciones climáticas a las que está expuesta la fachada, que pueden afectar la durabilidad de la pintura.