JUEVES, 31 DE OCT

Rosario: murió en la plaza San Martín un hombre de 63 años que vivía en situación de calle

Antonio nació en Buenos Aires en 1960. Hace poco más de treinta años llegó a Rosario con el sueño de ser peluquero. La muerte lo encontró el pasado domingo, con frío, en un banco de la plaza San Martín.

Por Elisa Soldano

La falta de un techo junto con las bajas temperaturas que se registraron durante los últimos días dejaron un trágico saldo en Rosario: el pasado domingo, en la plaza San Martín, falleció Antonio, un hombre de 63 años que se encontraba en situación de calle y que  padecía problemas cardíacos.

El domingo por la noche, la organización social “Me llaman calle” replicó un posteo en sus redes sociales en donde comunicó el fallecimiento de Antonio: “Nos toca saber que alguien que apreciábamos muchísimo murió solo en una plaza”.

En diálogo con Conclusión, el subsecretario de Abordaje Integral de Rosario, Gabriel Pereyra, recordó que Antonio –un hombre nacido en Buenos Aires a fines de septiembre de 1960, que supo ser peluquero y vivía en Rosario desde hacía más de treinta años– recibió ayuda de la Municipalidad en tres oportunidades. La última intervención ocurrió en abril del año pasado, cuando lo encontraron en situación de calle y le tramitaron una entrevista con el refugio de adultos mayores de la provincia.

El primer acercamiento de Antonio con la Municipalidad ocurrió en 2018, cuando fue al servicio de atención ciudadana y solicitó una ayuda económica para pagar el alquiler, dado que había perdido su departamento en un remate.

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“Trabajamos junto a los centros de salud, porque estuvo internado en el Roque Sáenz Peña, e iniciamos un proceso de ayuda económica para que pague un alquiler. En el 2019 su cuadro de salud se había agravado por un proceso de hipertensión, y nos solicitaron que le extendiéramos dos meses más de alquiler. El señor planteó que un personaje político le había prometido una pensión, que le iba a salir para mayo de ese año”, contó el funcionario.

Pasaron cuatro años sin tener novedades de Antonio, hasta que en abril del año pasado, el equipo de calle, en una recorrida, lo encontró y lo derivó a la Secretaría de Desarrollo Humano. “Le hicieron una entrevista y le sugirieron ingresar a un hogar de adultos mayores. Como en ese momento la Municipalidad no tenía lugar, se le gestionó una reunión con provincia. Le ofrecimos acompañarlo, pero nos dijo que no, que conocía el lugar y que podía ir por sus propios medios. Como no dejó registro, a partir de eso no tuvimos más noticias hasta el domingo, cuando nos enteramos que había fallecido”, recordó Pereyra.

Ir al refugio: una tarea compleja

“Trabajamos incansablemente para darle una mejor calidad de vida a las personas, pero a veces desisten de esos espacios. La población no lo sabe y piensa que el Estado no interviene, pero se dan situaciones donde el abordaje es muy complejo porque está atravesado por un montón de variables”, expresó Pereyra, quien comentó que en el último tiempo se volvió más frecuente que las personas “no quieran salir del espacio público”.

“Intervenimos siempre y cuando la persona voluntariamente acceda a la asistencia o a la ayuda, porque le rige el principio de autonomía. El objetivo es tratar de consensuar con la persona un proceso de alojamiento, a nadie se lo lleva por la fuerza. Pero hay pautas y reglas que hay que cumplir dentro del refugio y hay personas que no están dispuestas a eso”, explicó el funcionario.

Y observó: “En algunos casos también están en juego los problemas de consumo, porque en los refugios no se puede consumir ni ir con objetos que generen daños. Muchas veces las personas desisten de ir a un refugio”.

Rosario cuenta con 180 plazas para que las personas en situación de calle puedan pasar las noches, bañarse y recibir un plato de comida caliente. Sobre la demanda en estos espacios, Pereyra indicó que hasta el momento está “bajo los parámetros del año pasado”, pero reconoció que de a poco, y con la intensificación de los fríos, los centros empiezan a poblarse y en pocas semanas estarán con su capacidad “al máximo”.

La asistencia para personas en situación de calle puede pedirse mediante la línea 147; a través del “Muni Bot”, un chat de WhatsApp disponible mediante el 341-5440147; a través de la página oficial del municipio; o presentándose en la Secretaría de desarrollo Humano, ubicada en Santa Fe al 638.

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