Educación financiera: estar informados para no caer en espirales de endeudamiento
"Las personas que se acercan a las oficinas llegan con la notificación de embargo, intimación para el pago de deudas o convenios de pago. Muchas veces quienes manejan el crédito se basan en la falta de información, publicidad engañosa, tasas de interés elevadas, mecanismos informales para exigir el pago de deuda o pedido de quiebra como castigo o presión para el cobro" enfatizó Valeria Vaccaro.
- Consumidores
- Ago 2, 2024
Pese a estar sumergidos en una sociedad de consumo, que alimenta de todas la maneras posibles, la acción de consumir «a como de lugar», es necesario contar con mayor información a la hora de adquirir un bien o servicio mediante un crédito.
La forma de consumir mutó y cada vez son menos quienes usan dinero en efectivo o ahorran para luego comprar. En este nuevo paradigma, el consumidor primero compra y luego ve como lo financia.
Aquí cobra relevancia la educación financiera, una herramienta que hará que las personas no sean engañadas o caigan en un espiral de endeudamiento.
Para profundizar al respecto y conocer cuáles son las posibilidades reales que tenemos a la hora de adquirir un crédito, desde Consumidores en Acción, la doctora Valeria Vaccaro, vicepresidenta de la Unión de Usuarios y Consumidores da cuenta de algunos consejos y también una serie de aplicaciones que pueden ser útiles. «Es importante poder darles a los consumidores herramientas que les van a servir para tomar decisiones a la hora de contraer un crédito o hacer un determinado gasto”.
«Las personas que se acercan a las oficinas llegan con la notificación de embargo, intimación para el pago de deudas o convenios de pago”. «Estamos ante un fenómeno social y económico denominado sobre endeudamiento. Es un sistema perverso generado por las entidades bancarias o financieras, y desde las asociaciones de consumidores vemos la falta de información en materia financiera” enfatizó.
Anteriormente, la sociedad compraba mayormente con dinero en efectivo, gastando aquello con lo que contaba en el momento. “Actualmente se ha pasado a comprar mediante créditos <credit society>. Compro ahora, para disfrutar ahora y luego pienso como voy a financiarlo. Esto implica un cambio de paradigma, además en las generaciones actuales se presenta dentro de una masificación de consumo, en donde la satisfacción no está en el uso y goce del bien, sino simplemente en adquirirlo”.
Detrás de esta lógica y forma de consumo están quienes manejan el crédito. “Muchas veces se basan en la falta de información, publicidad engañosa, tasas de interés elevadas, mecanismos informales para exigir el pago de deuda o pedido de quiebra como castigo o presión para el cobro”.
Ante este cambio de paradigma es importante adentrarnos en la educación financiera. “La información es poder siempre que podamos transformarla en acción. La misma nos libera de la <esclavitud> a la que nos tiene sometidos la sociedad de consumo. No podemos cambiar la realidad, pero sí nuestra actitud hacia el consumo”.
«Hoy existen muchas aplicaciones que nos sirven para poder administrarnos o realizar comparaciones a la hora de tomar un crédito. Las mismas son herramientas que pueden ayudarnos a la hora de adquirir un bien o servicio”, concluyó.