Caso Pérez Volpin: imputaron a dos directivos del sanatorio La Trinidad
La fiscal de instrucción los acusa por el delito de encubrimiento. Además, fueron imputados otros tres trabajadores involucrados por falso testimonio.
- Judiciales
- Sep 25, 2019
La Justicia imputó esta mañana a dos directivos del sanatorio La Trinidad, en el marco del presunto encubrimiento a los médicos que participaron de la endoscopía que terminó con la vida de la periodista Débora Pérez Volpin.
La fiscal de instrucción Nancy Olivieri imputó al director de La Trinidad, Roberto Martingano, y al de la empresa prepaga Galeno, Eduardo Cavallo. Así mismo, la fiscal también imputó bajo el cargo de ocultamiento de pruebas a Sebastián Cecchi Gallo y a la instrumentadora quirúrgica Mirian Frías, y la jefa de servicio Claudia Balceda, por falso testimonio. Por los delitos de encubrimiento, los acusados podrían ser condenados a una pena de seis meses hasta tres años, mientras que, si se comprueba que hubo falso testimonio, la condena es de 4 años e inhabilitación por el doble de tiempo.
Débora Pérez Volpin falleció el 6 de febrero del año pasado en el sanatorio de Palermo mientras le practicaban una endoscopía, ya que sentía un dolor abdominal por el cual le ordenaron hacerse éste estudio.
Por la muerte de la periodista fueron llevados a juicio el endoscopista Diego Bialolenkier y Nélida Puente, en un proceso que estuvo a cargo de Javier Anzoátegui. El endoscopista fue condenado a tres años de prisión condicional y 7 años y 6 meses de inhabilitación para ejercer su profesión mientras que la anestesista fue absuelta, medida que fue apelada por la familia de la periodista.
Una nueva causa fue abierta a partir del pedido que hizo la familia de la comunicadora fallecida durante el juicio oral y público, ya que consideraban que hubo «obstaculización» en la investigación de parte de la clínica y que entregaron un endoscopio diferente del que se usó en el estudio que terminó con la vida de Pérez Volpin.
El abogado de la familia, Diego Pirota, dijo que «desde el primer momento» habían sostenido que «este equipo no se había utilizado el día de la endoscopía, porque es un equipo viejo, vetusto, que no tiene nada que ver con la tecnología de los demás que tiene la clínica». «Éste no graba, y siempre especulamos que no conocíamos el equipo verdadero para que no pudiéramos ver las imágenes del momento en que se realizó la lesión al esófago de Débora».