Derribaron dos puestos de venta de drogas: ambos relacionados con dos crímenes que aterrorizaron a la ciudad
Se trata de dos inmuebles del Barrio Santa Lucía que ya habían sido intervenidos en el mes de agosto. Ambos sirvieron como base de operaciones para el crimen del colectivero Marcos Daloia y el playero Bruno Bussanich.
Este miércoles el Ministerio de Seguridad de Santa Fe concretó el derribo de dos puntos de ventas de drogas en barrio Santa Lucía. Ambos habían sido utilizados como base de operaciones para la planificación de los crímenes del chofer de la línea K, Marcos Daloia y el playero Bruno Bussanich.
De acuerdo a la información brindada por el la cartera de Seguridad y los fiscales de Rosario, Patricio Saldutti y Franco Carbone; los dos inmuebles, ubicados en Misiones al 2100 y al 2200 vinculados a la venta de estupefacientes, había sido inhabilitados el 29 de agosto de este año con la construcción de un tapial. Pese a ello, el lugar siguió funcionando, por lo cual, requirieron la orden judicial para su derribo.
Finalmente, con la autorización de un magistrado,y en el marco de la Ley de Microtráfico, se derribaron ambas edificaciones en forma definitiva.
Cabe destacar que, además de una serie de incidencias de violencia altamente lesiva que se llevaron a cabo en ambos domicilios, la construcción de Misiones al 2100 fue el lugar que sirvió de base para la comisión del homicidio del colectivero de la línea K Marcos Daloia. En tanto, uno cuadra más adelante, en la propiedad ubicada en la misma calle, a la altura del 2200 fue donde se planificó el crimen del playero de la Estación de Servicio de Mendoza al 7600, Bruno Bussanich.
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Desde fiscalía aseguraron que, todos los autores de esos hechos están imputados y en prisión preventiva -los que son mayores a cargo del Ministerio Público de la Acusació y la Oficina de Gestión Judicial, el Colegio de Jueces de Primera Instancia Penal y los que son menores a cargo de la Justicia de Menores- pero todavía hay una persona prófuga con recompensa del gobierno provincial que aún está vigente.
“Aprovechamos la oportunidad para volver a solicitar colaboración. La persona esta está identificada, hay fotos, hay videos sobre él. Hubo información que podía estar en provincias vecinas a Santa Fe. Hubo investigaciones de PDI en esas provincias. Pasamos cerca, pero todavía no ha podido ser aprendido”, señaló el fiscal fiscal Franco Carbone.