Dos chicos encontraron la cabeza y el torso de un chico asesinado en un macabro crimen
Lucas Nahuel Ampuero fue asesinado y desmembrado a fines de febrero. Hasta ahora solo había aparecido un brazo. Por el homicidio está detenido un sicario de una conocida jefa narco. Los investigadores buscan confirmar que los restos encontrados por los niños pertenezcan a Ampuero.
El pasado sábado por la tarde, dos chicos que viven en la localidad de Godoy Cruz, en Mendoza, vivieron momentos de terror cuando se toparon con un macabro hallazgo mientras jugaban detrás de unos cerros. Ambos descubrieron una bolsa de la cual salía un fuerte olor y cuando la abrieron, se encontraron una cabeza y parte de un torso humano, en avanzado estado de descomposición.
De acuerdo a las primeras versiones, los miembros pertenecerían a Lucas Nahuel Ampuero, un joven asesinado a finales del mes pasado. La victima, de 25 años de edad, había desaparecido el pasado 2 de febrero y desde entonces era intensamente buscado por la Policía de Mendoza. Hace tan sólo unos días atrás, las autoridades habían dado con restos que permitieron identificarlo. Se trataba apenas de un brazo. Un tatuaje, junto a la prueba de ADN, confirmaron que se trataba de Ampuero.
Luego de que los niños hallaran los restos, un familiar se comunicó con el 911. Fue entonces que la Policía se hizo presente, tomó muestras y ahora esperan la confirmación del ADN. Las probabilidades de que los restos pertenezcan a Nahuel son altas pues el brazo hallado presentaba las mismas características.
La hipótesis de los investigadores sobre el crimen de Ampuero
Por el caso quedó detenido Franco Ábrego (26), conocido como “El Cara Cortada”, que tiene un prontuario como sicario de Sandra “Yaqui” Vargas, la famosa jefa narco mendocina condenada en 2016.
La hipótesis que manejan los investigadores del caso es que Ampuero fue asesinado por “Cara Cortada” el domingo 26 de febrero en su casa, con ayuda de su madre, Nora Beatriz Díaz, quién tiene pedido de captura. Tras ello, desmembraron el cuerpo y quemaron algunos de los miembros en un tanque de 200 litros. Dicho accionar generó una columna de humo y fuego que fue alertada por los vecinos hacia la Policía, quién terminó allanando el domicilio de los presuntos asesinos.