VIERNES, 22 DE NOV

Imputaron al sexto acusado por el crimen de Máximo Jerez

Es el sexto imputado por el homicidio del niño de 11 años que conmocionó a la ciudad y el país. Tras el hecho enviaron más fuerzas federales a Rosario.

Foto: Vecinos derribaron un búnker en el barrio tras el asesinato

Un hombre fue imputado este jueves por el crimen de Máximo Gérez, el niño de 11 años asesinado en el barrio Los Pumitas el 5 de marzo de este año, hecho que desencadenó en una pueblada contra un búnker de venta de drogas en el lugar.

El fiscal Adrián Spelta de la Unidad de Homicidios le imputó a Nicolas T. por el delito de homicidio calificado en calidad de coautor. Es el sexto imputado por el crimen. Por su parte, el juez de primera instancia Postma dictó la prisión preventiva por el plazo de ley.

La Fiscalía le atribuye Nicolas T., junto Maximiliano Oscar C. y Nicolás Ariel C. (ya imputados), la balacera ocurrida en el la intersección de las calles Cabal y Pasaje San José de Rosario el 5 de marzo pasado a la 1.30 aproximadamente.

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De acuerdo a la investigación de Fiscalía, los imputados llegaron al lugar a bordo de un automóvil Honda Civic, el que era conducido por el llamado Maximiliano Oscar C. y comenzaron a disparar armas de fuego, en forma directa contra la humanidad de las personas que se encontraban en los frentes de los domicilios, ocasionando en forma inmediata la muerte de Máximo Iván Jerez de 11 años. En ese episodio, resultaron heridos Alexis A. (13 años), quien recibió una herida de arma de fuego en torax; Nahiara F. (2 años) recibió un disparo de arma de fuego en brazo derecho y Salomón L. (13 años), quien recibió una herida de arma de fuego en la boca.

Por este hecho también se le imputó a Gustavo Nicolás B., Esteban Ezequiel M. y Alejandra Fabiana R., el haber ocultado en el domicilio que habitan en calle Campodónico al 3200 de Rosario, a sabiendas de su procedencia ilícita, el automóvil marca Honda, modelo Civic, utilizado por los autores para cometer el asesinato.

El episodio generó conmoción en la ciudad y el país, y al día siguiente los vecinos protagonizaron una pueblada en la que derrumbaron varios bunkers de narcos. Además, provocó la reacción de las autoridades nacionales, que enviaron más agentes federales a Rosario, muchos de los cuales se ubicaron en el barrio.

 

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