Amenazas a Pullaro: imputaron a «Fran» Riquelme por ofrecer 300.000 pesos por una de las balaceras

Tras el anuncio de la ministra de Seguridad nacional, Patricia Bullrich, de que aislarán a los presos de alto riesgo tras las amenazas que recibió el gobernador de Santa Fe, Maximiliano Pullaro, el fiscal rosarino Diego Carbone, perteneciente al Ministerio Público de la Acusación (MPA),  dio detalles de la vinculación de «Fran» Riquelme con el caso.

La investigación judicial por las amenazas reveló que Riquelme, jefe narco de una banda de Ludueña, el «Clan Riquelme», es el autor de las diversos hechos de intimidación contra el mandatrio santafesino.

Con este dato obtenido, Bullrich dispuso medidas: «Di instrucción al subsecretario de Política Penitenciaria para que, aquello que se considera prima facie por la justicia de Santa Fe, que está llevando la amenaza, va a entrar al programa de alto riesgo».

Ante este avance en la investigación, el fiscal Carbone explicó: «El ataque lo ordenó desde el Penal de Ezeiza. Ofrecía 300 mil pesos por uno de los ataques e insistía a menores de edad para que lo hagan».

Francisco Ezequiel «Fran» Riquelme se convirtió en uno de los narcos más temidos de Rosario y, a pesar de estar preso, sigue liderando la banda criminal. Se lo acusa de reclutar sicarios y ordenar extorsiones.

La base de sus ataques eran en la zona oeste de Rosario, fundamentalmente en los barrios Empalme Graneros y Ludueña, tanto balaceras (incluidas escuelas) como homicidios. Allí había dos facciones, una perteneciente a Esteban Alvarado y la otra a «Los Monos» que se enfrentaban diariamente.

El año pasado, Riquelme fue imputado por los delitos de intimidación pública, amenazas coactivas y abuso de armas. Su objetivo era enviar un mensaje a una banda rival y conseguir mejoras en las condiciones de detención en Ezeiza.

Pullaro recibe amenazas desde que anunció la restitución de los pabellones de alto perfil para jefes narcos y sicarios en la Unidad Penitenciaria 11 de Piñero y de la prohibición del ingreso de familiares con alimentos.

Por este motivo, informó que decidió sacar de Rosario a su familia y mudarla a otra localidad de Santa Fe para su seguridad ante el avance del narcotráfico por sus medidas.