MARTES, 26 DE NOV

Con la ayuda de una empleada del Pami, banda organizó una usurpación desde la cárcel

Falsificaron formularios de la dueña recientemente fallecida, accediendo a la base de datos del Pami. Intrusaron la vivienda y la terminaron alquilando. La justicia les dictó a todo el grupo familiar involucrado la prisión preventiva, aunque uno de ellos ya cumple condena en Piñero.

 

Una familia fue imputada por usurpar una vivienda en zona noroeste, específicamente en las inmediaciones de Urquiza al 6000. La justicia logró determinar que tras el fallecimiento de la propietaria, los integrantes de la banda delictiva falsificaron documentos obtenidos ilegalmente de la base de datos del PAMI y avanzaron en la usurpación.

El plan comenzó a ejecutarse en junio de 2021 cuando un hombre llamado Oscar R. -que ya estaba cumpliendo una condena- a sabiendas del fallecimiento de la propietaria del inmueble se propuso ocupar la vivienda, contando para ello con el aporte de su madre Gladys G., una empleada del Pami, quien por sus funciones pudo acceder a la base de datos del sistema informático de una seccional cordobesa del organismo, sustrayendo información para luego insertar declaraciones falsas en un formulario y estampar falsamente la firma de la víctima.

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Luego de apropiarse ilegalmente de la vivienda se pudo determinar que Oscar R. se la entregó a su hijo Andy B. –quien cumple una pena en la Unidad Nº 11 de Piñero privado de su libertad– y a su pareja Sandra W., que fue quien realizó los actos de administración sobre la casa, tomando su posesión ilegítimamente, alquilando la misma a terceras personas y recibiendo dinero en efectivo.

El fiscal Pablo Socca les atribuyó que Oscar R., junto a su madre, Gladys G., y junto a Andy B. y su pareja Sandra W., haber organizado, planificado y ejecutado la usurpación de la vivienda con el objeto de usufructuar la posesión ilegal del inmueble. A Gladys G. también se la imputó por abuso de sus funciones como empleada de una institución pública.

La jueza de Primera Instancia Silvia Castelli formalizó la imputación y dispuso la prisión preventiva morigerada en formato prisión domiciliaria tanto para Gladys G y para Sandra W. En tanto, para Oscar R. y para su hijo Andy B. se dispuso que continuarán cumpliendo prisión efectiva por el plazo fijado.

 

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