Hubo audiencia de revisión por el caso de «Bocacha» Orellano y las partes expusieron ante la nueva jueza

La causa que investiga la muerte de Carlos “Bocacha” Orellano sumó un nuevo capítulo este miércoles cuando, en el marco de la revisión de las sentencias a los policías y patovicas condenados, la jueza Gabriela Sansó –reemplazante del magistrado Daniel Acosta, que se jubiló el pasado 1 de julio– escuchó a los imputados y a la familia de la víctima para interiorizarse en el caso.

La audiencia, que tuvo lugar en los Tribunales Provinciales de Pellegrini y Balcarce, tuvo como objetivo que la jueza Sansó, que recientemente se sumó al caso, conozca de primera mano los detalles de la investigación para resolver, junto a los magistrados Georgina Depetris y Alfredo Ivaldi Artacho, si confirma las condenas de primera instancia.

Cabe recordar que, a mediados del año pasado, los jueces de primera instancia Mariano Aliau, Aldo Bilbao Benítez y José Luis Suárez condenaron al patovica Emiliano López a 6 años de prisión; a la policía Karina Gómez a 9 años; y al uniformado Gabriel Nicolossi a 12 años.

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En diálogo con los medios, entre ellos Conclusión, el abogado de la querella, Salvador Vera, mencionó: “La jubilación del juez nos pone en un escenario poco común, de mucha incertidumbre, que implica un alto nivel de revictimización para toda la familia de Bocacha. Esperamos que la integración de la nueva magistrada produzca una resolución pronta del caso que confirme el veredicto de primera instancia, pero no es la sensación que tenemos”.

El abogado precisó que la audiencia de este miércoles se generó porque hay “votos divididos, diferentes”, que no llegan a conformar una mayoría absoluta para ratificar las sentencias de primera instancia o modificarlas.

“Esta es una audiencia de conocimiento directo de la nueva magistrada respecto de las partes, fundamentalmente de los imputados. En este caso lo van a recibir a (el papá de Bocacha) Edgardo, que ha querido hacer conocer a la nueva jueza cuáles son las consecuencias que le generó a él y a su familia el asesinato de su hijo”, señaló el letrado.

“Si el juez Acosta no se hubiese jubilado, al no haber una mayoría conformada, tendría que haberse integrado o sumado otro magistrado para obtener la mayoría necesaria para emitir una sentencia válida”, aclaró Vera.

Por su parte, Edgardo Orellano recordó: “El juicio fue en febrero, se tomaron cuatro meses para dictaminar sentencia. Los primeros días de junio nos avisaron que el día 28 se iba a leer la sentencia porque supuestamente estaba firmada por los tres jueces, pero el 25 se bajó el magistrado Acosta, que todavía no estaba retirado, se jubilaba el 1 de julio. Lo único que tenía que hacer era leer la sentencia que ya estaba firmada, pero ahora esa resolución no se va a tener en cuenta, nos queda la duda de qué había sentenciado ese juez”.

Detalles del caso

“Bocacha” fue asesinado durante la madrugada del 24 de febrero del 2020, a la edad de 23 años, en inmediaciones del boliche Señor Ming.

Según el fiscal que investigó el caso, Patricio Saldutti, los patovicas y policías imputados sacaron al joven del boliche y lo golpearon. Luego, lo arrinconaron contra una baranda y lo obligaron a saltar al río Paraná, donde murió ahogado. El cuerpo de Orellano fue hallado dos días después.

Según la causa, los policías dieron aviso de lo sucedido al 911 y a Prefectura media hora después de que el joven haya caído al río.