La Cooperativa “Pariendo Justicia” se convirtió en realidad

Por Gisela Gentile

La pérdida de un ser querido acarrea ante todo un sufrimiento natural por la ausencia del mismo. Pero claro, todo se hace cuesta arriba cuando además de tener que superar el duelo, se debe luchar por lograr la tan ansiada justicia.

Conocido es que en el camino que deben atravesar los familiares en búsqueda de la misma, obliga a relegar sueños, tiempo, y en muchas oportunidades, a convertirse en fiscales aportando pruebas e insistiendo en la celeridad de las causas. Algo que irremediablemente termina atentando con su estabilidad laboral y emocional.

Es por ello que un grupo de familiares de víctimas de la ciudad de Rosario, lejos de quedarse de brazos cruzados, fueron tras el anhelo de formar una cooperativa de trabajo que les otorgara la posibilidad de volver nuevamente al mercado laboral.

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Conseguir la legalidad de la misma no fue nada sencillo debido a que esa piedra en el zapato denominada burocracia , hiciera que la gestación de la cooperativa “Pariendo Justicia” se dilatara más de lo pensado. Finalmente hoy se ha concretado y algunas de sus integrantes visitaron los estudios de Conclusión para contarnos como lograron plasmar esta iniciativa, y la proyección a futuro de la misma.

“Todos pasamos por lo mismo, los dolores suelen ser similares más allá que cada uno lo transita como mejor puede. Ante la pérdida abrupta de un familiar, uno no sabe donde concurrir, qué hacer, y a eso debemos sumarle el lento e injusto pedido de justicia. Esto se repite una y otra vez, los familiares tenemos que ser fiscales, abogados, y tener los expedientes siempre a mano con lo que eso significa”, sentenció Gabriela Vega.

“Es loable que ninguno de los familiares hayamos querido tomar venganza por mano propia, por el contrario, siempre pretendimos construir desde otro lugar. Sabemos que nuestro camino es el de la justicia, muchos familiares han tenido que dejar el territorio, han perdido casa y trabajo, por eso pensamos en esta herramienta de construcción colectiva”, añadió.

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Una cooperativa que no solo intenta colocarlas en el mercado laboral, sino que también oficiará de punto de encuentro y sostén para muchos, “recibimos apoyo de la escuela de psicología social, ellos nos ayudaron mucho y fue realmente muy útil, ya que mediante las charlas podíamos hablar entre todas sobre lo que estábamos viviendo. Tanto esto último, como los encuentros con cooperativa de contadores y demás capacitaciones, fueron posibles gracias a <El Centro Único de Asistencia a la Víctima>, una oficina que nos brindó todas esta posibilidades para que hoy estemos concretando la cooperativa “Pariendo Justicia”, concluyó Eleonora Burgueño.