Piden prisión preventiva para los 18 policías acusados de la muerte de Campos y Medina
Se trata de los dos jóvenes que fueron asesinados en la zona sur, luego de una persecución policial. Las víctimas recibieron entre 5 y 9 balazos y terminaron estrellándose contra un árbol en Callao y Arijón.
Este miércoles, a primera hora de la tarde, en la Sala I de los Tribunales Provinciales de Rosario, comenzó la audiencia imputativa a los 18 policías detenidos por el crimen de David Ezequiel Campos y Emanuel Medina, muertos durante una balacera ocurrida en el mes de junio, en la zona sur de la ciudad.
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La audiencia presidida por el juez Carlos Leiva se lleva adelante en una sala colmada de gente, en la cual los fiscales Adrián Spelta y Luis Schiappa Pietra piden la imputación por diferentes delitos, de acuerdo al grado de responsabilidad de cada uno. Homicidio calificado agravado por su función, encubrimiento doblemente agravado por ser funcionarios y por falsedad ideológica, adulteración de la escenas y de los hechos.
Imputaciones
Los policías sospechados hasta el momento son 18, entre los cuales los investigadores identificaron distintas acciones delictivas. A Alejandro B., la Fiscalía le imputó homicidio calificado agravado por su función. En tanto para Paola C., Alexis T., Jesica L., Daniela A., Leandro C., Leonel M., Aldo B., Claudio C., María de los Angeles R., Fernando V., Germán M., Walter O., Marcelo E., Roxana R., Ricardo A., Alejandro Luis B. los fiscales solicitaron encubrimiento doblemente agravado por ser funcionarios y por falsedad ideológica. Tambien a algunos de ellos se los imputará por adulteración de pruebas y falsificación de las actas policiales.
Pruebas
Tanto los fiscales como los querellantes, Marcia López Martín y Juan Ignacio Murray anticiparon la presentación de una gran cantidad de evidencias que respaldan la teoría de un accionar criminal de los efectivos quienes habrían perseguido a los dos jóvenes, abrieron fuego contra ellos, los remataron al llegar al lugar y luego plantaron evidencias para que pareciera un tiroteo. Las mismas consisten en los informes periciales, balística, el recorrido de los móviles según los GPS, numerosos testimonios prestado los los testigos de los hechos, escuchas telefónicas, reportes fílmicos de las cámaras de seguridad, actas del gabinete científico, fotos de planimetría, informes de rastros médicos y policiales, informe de central de emergencia 911 con el contenido de cámaras, informes de las autopsias y barridos electrónicos. Una vez que las querellas y la Fiscalía hicieron su planteo, tocará el turno de las defensas y luego el juez decidirá si les otorga la prisión preventiva o no.
La mañana del viernes 23 de junio las crónicas policiales dieron cuenta de una cinematográfica persecución policial en la zona sur que duró 35 minutos y en la que resultaron muertos, luego de un enfrentamiento, dos supuestos delincuentes que habían evadido un control de rutina. Ellos eran Emanuel Medina, de 32 años, y David Ezequiel Campos, de 28. Pero tan sólo unas horas después, la reconstrucción de los hechos dio por tierra con la versión oficial y planteó un escenario que remitió a otro estremecedor caso de violencia institucional. El supuesto enfrentamiento no fue tal y los jóvenes, que resultaron acribillados por varios impactos de bala, nunca dispararon un tiro y según los testigos, ni siquiera estaban armados.