Secuestraron casi un centenar de pieles de animales que se vendían ilegalmente
Estos productos, cuya comercialización se encuentra expresamente prohibida por la Ley 22.421, se encontraban dentro de los tres locales para su venta al público. También imputaron a los responsables de la comercialización.
Casi un centenar de pieles de animales que se comercializaban en forma ilegal en tres locales del barrio porteño de San Telmo fueron secuestradas en las últimas horas.
Según se informó de manera oficial, la Unidad Fiscal Especializada en Materia Ambiental (UFEMA), dependiente del Ministerio Público Fiscal de la Ciudad de Buenos Aires, procedió al secuestro de tapados, bufandas, mantas y otros cortes de pieles naturales de ejemplares silvestres como zorro, chinchilla, visón, nutria, vizcacha, entre otros ejemplares y que se comercializaban en forma ilegal en tres locales ubicados en Defensa al 1100.
El procedimiento fue ordenado por el fiscal Matías Michienzi, quien delegó las tres diligencias en la División Delitos Contra La Salud y Seguridad Personal de la Policía de la Ciudad, quienes, en forma conjunta con inspectores de la Agencia Gubernamental de Control (AGC) y de la Dirección General de Control Ambiental (DGCONTA) e inspectores de la AGIP y de la Subsecretaría de Ambiente y Desarrollo Sustentable de la Presidencia de la Nación (Ex Dirección General de Fauna), procedieron a la incautación de la mercadería.
Estos productos derivados de animales, cuya comercialización se encuentra expresamente prohibida por la Ley 22.421, se encontraban dentro de los tres locales para su venta al público.
El fiscal imputó a los responsables de los comercios por infracción al art. 79 del Código Contravencional por el «ejercicio ilegal de una actividad», por cuanto claramente no se encuentran incluidos en ningún rubro comercial las mercaderías que expresamente se encuentra prohibidas por la Ley.
«Estas prácticas ilegales son el eslabón final del maltrato animal y del tráfico ilegal de fauna silvestre», aclaró el fiscal que en forma simultánea con la sustanciación del proceso contravencional inició actuaciones administrativas ante las áreas del Gobierno porteño ante las faltas advertidas en el desarrollo de la actividad comercial, como así también ante el organismo nacional por la Ley Nacional de Fauna (Ley 22.421).