Arrancó una nueva ola de despidos masivos de trabajadores estatales

Tras el anuncio de este viernes por la mañana por parte del Gobierno sobre que se vendrán nuevos despidos para trabajadores estatales desde el 30 de junio, finalmente empezaron a ser notificados algunos desde la tarde de este viernes, por lo que se acelera el proceso de reducción de la planta del Estado, un objetivo concreto de la gestión de La Libertad Avanza en pos de su «ansiado» recorte del gasto público.

En ese sentido, las comunicaciones de no renovación de contratos incluyen hasta 400 empleados del área de Capital Humano y también en el Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales (INCAA). 

Respecto de la primera cartera, se trata de la parte perteneciente a centros de referencia y trabajo territorial. En cuanto a la institución cultural, corresponden a personas que ingresaron por cupos trans y de discapacidad. 

Ya arrancó la nueva ola de despidos.

Al menos 400 personas en Capital Humano, principalmente de los centros de referencia, de trabajo territorial.

También hay más despidos en el INCAA, entre ellos muchas personas que ingresaron por cupos trans y de discapacidad.

— Nico Fiorentino (@NicolasFioren) June 28, 2024

«No está el número definitivo. Hay un universo de 70 mil contratos que están en revisión permanente, de esos hay 23 mil que se dieron de baja y el resto seguían en revisión permanente», había anunciado más temprano el vocero presidencial, Manuel Adorni.

En la misma línea, había anunciado que «el 30 de junio será otra barrida y limpieza que se le dé a ese universo. Los que continúen vigentes será por un tiempo y se seguirá evaluando cada uno de los casos de una manera absolutamente quirúrgica, para no cometer errores».

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Con una recesión económica en marcha, esto no hace más que profundizar un escenario de desempleo creciente, mientras aumentan los números de pobreza e indigencia, y ratifica el tiro de gracia a la clase media con la sanción de la Ley Bases, que supone un auténtico retroceso en materia de soberanía nacional y la entrega de recursos a intereses foráneos.

Con esta medida, Javier Milei es «coherente» con su prédica de ser el topo que destruye al Estado. El plan motosierra sigue acentuándose y el ajuste lo está pagando el pueblo trabajador, mientras la verdadera «casta» permanece impoluta. Un auténtico modelo colonial al servicio de las grandes corporaciones multinacionales.