Cristina Fernández: «Aunque pensemos distinto no somos enemigos, somos argentinos»
Por su parte, la senadora Giménez manifestó en el homenaje a las Abuelas de Plaza de Mayo: "Necesitamos una democracia sin proscripciones; donde la justicia social sea una realidad".
- Conclusión en Buenos Aires
- Mar 7, 2023
La vicepresidenta Cristina Fernández encabezó este martes en el Senado un homenaje a las Abuelas de Plaza de Mayo y advirtió que la sociedad argentina y la dirigencia política fueron «absolutamente disciplinadas» por la última dictadura militar.
Fernández de Kirchner planteó que los efectos del terrorismo de Estado se vislumbran «en el disciplinamiento de la sociedad y la dirigencia política, que dicen ‘Esto no se puede’ o ‘Contra el FMI no se puede ir'».
Por eso, sostuvo que se equivocan quienes creen que los represores «fracasaron porque fueron condenados a cadena perpetua; han disciplinado a la sociedad», insistió.
La vicepresidenta se sumó al acto de homenaje a la titular de Abuelas de Plaza de Mayo, Estela de Carlotto, y otras integrantes de esa entidad que había sido motorizado por la senadora Nora del Valle Giménez, del Frente de Todos (FdT) de Salta.
Fernández de Kirchner recordó también la figura del expresidente Néstor Kirchner, al advertir durante el acto, que se llevó a cabo en el Salón Azul del Senado, que «él está acá con todos nosotros».
La titular de la Cámara alta recordó que, con el impulso de las políticas de Derechos Humanos, Néstor Kirchner «sintió que había cumplido con todos y cada uno de la generación de la que formábamos parte, que siguieron sus convicciones y que, si se equivocaron, se equivocaron con su cuerpo, no como otros y los que ponen las cosas son el pueblo y la gente». En esa línea, definió a su fallecido esposo como un «indisciplinado».
«El gran rol que tuvo Néstor fue el de ser un gran indisciplinado. Y yo, que fui su discípula, por ahí, más o menos; también», expresó.
En su discurso, Fernández de Kirchner dijo recordar «como si fuera hoy» el día en el que Carlotto encontró a su nieto, el 5 de agosto de 2014.
Y evocó: «Estaba en Olivos, serían las 2 ó 3 de la tarde, y vino Mariano, mi secretario, y me dijo ‘Encontraron el nieto de Estela’. Ahí se me vino a la memoria Néstor, porque toda la vida él me había dicho ‘Estela va a encontrar a su nieto. No sé por qué, pero tenía la absoluta convicción», relató.
La vicepresidenta destacó además que Argentina «es un ejemplo en el mundo» porque «es el único lugar donde se juzgaron en el mismo país donde se habían cometido las atrocidades».
«El ‘Nunca Más’ es en serio porque el horror que se vivió hoy no sería tolerado por Argentina ni ningún país del mundo. Hoy hay otras formas más solapadas y sutiles de clausurar los sueños de quienes creen que un mundo diferente puede ser posible. Ya no son tanques, ahora pasan en los tribunales», graficó.
Al ponderar la «valentía» de las Abuelas de Plaza de Mayo, la exmandataria aseguró que «no hay más alto honor que el recuerdo de un pueblo, el que te da la historia cuando cumpliste con tus convicciones y con la sociedad».
«Las Abuelas tuvieron la valentía que no tuvimos tantísimos otros argentinos de enfrentar. No les importó porque son madres y a las madres no hay nada que les importe más que le toquen que un hijo. Las vamos a llevar siempre en el corazón», expresó.
En el acto, del que participaron los ministros de Defensa, Jorge Taiana; del Interior, Eduardo «Wado» de Pedro; de Justicia, Martín Soria; de Cultura, Tristán Bauer, el Secretario de Derechos Humanos, Horacio Pietragalla Corti, y la titular de la Cámara de Diputados, Cecilia Moreau, se distinguió a Carlotto y a las integrantes de la asociación Sonia Torres de Parodi, Carmen Ledda Barreiro y Buscarita Imperio Roa, con la mención de honor «Juana Azurduy de Padilla».
En nombre de las cuatro homenajeadas, Carlotto señaló que la «historia» de los desaparecidos «nunca ha sido defendida en el mundo como en la Argentina. El bastón ayuda a darle a los que blasfeman y mienten, atrofian las mentes de los chicos y jóvenes, hay que ayudarlos a pensar y a ser buenos, resaltó.
«Aunque pensemos distinto no somos enemigos, somos argentinos, y por esta patria hay que seguir hablando afuera de casa y caminar. Hacer el camino ayudando a quien esta confundido», aseveró.
Carlotto remarcó que «faltan 300» nietos por encontrar y las Abuelas «ya muchas cosas no podemos hacer, pero los nietos lo hacen por nosotros. Gracias en nombre nuestro y de las abuelas que también están arriba y nos están ayudando y a esta mujer», dijo, en referencia a Fernández de Kirchner.
Por su parte, la senadora Giménez enumeró algunos de los logros de Abuelas de Plaza de Mayo como el impulso de los Juicios de la Verdad y la creación del Banco de datos Genéticos; al tiempo que expresó: «Necesitamos una democracia sin proscripciones; donde la justicia social sea una realidad».
Esas expresiones motivaron en la mayoría de los presentes la consigna «Cristina Presidenta», que había sido precedido, antes del inicio del acto, por el canto que identifica a la Juventud Peronista (JP).