Actividad económica en Rosario: la industria se sostiene pero cae el sector comercial

A modo de balance, el secretario de Desarrollo Económico y Empleo de la Municipalidad de Rosario, Sebastián Chale habló con Conclusión y señaló un 5% de incremento de nivel de actividad económica en la facturación global, computando los meses de enero y febrero 2023, respecto al mismo período 2022. Mientras que a nivel nacional, el incremento fue de 2,5%.

“Viene con un arrastre de fuerte actividad a nivel industrial, pero hay una caída marcada del comercio después de las Fiestas. Son meses donde generalmente decaen los niveles de facturación”, precisó el funcionario y agregó: “En el último trimestre de 2022 y estos primeros meses de 2023, observamos una caída puntual del sector comercial que seguramente tenga que ver con la caída del poder adquisitivo del salario”.

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Específicamente sobre la actividad industrial, dijo que “sostiene un nivel de actividad producto de que también hay una restricción de productos importados. Si bien eso tiene algún impacto sobre el precio, tiene un efecto sobre algunos sectores que son muy importantes en el tejido industrial de Rosario como electrodomésticos, línea blanca”.

“Estos números no sorprenden porque tienen que ver con un fuerte proceso inflacionario. Hay familias con varios ingresos o más de uno y no cubren la canasta básica”, apuntó.

Asimismo, se refirió a los números de pobreza que “marcan esta paradoja ya sostenida de tener niveles de desempleo bajo, actividad en crecimiento, pero con un nivel de pobreza que supera largamente el 30% en Rosario, que se sostiene, no aumenta, pero no se revierte”.

Consultado sobre la inflación, Chale admitió que “no hay ninguna señal en la macroeconomía que indique que va a desacelerarse. No se ve en el corto ni mediano plazo una desaceleración de esos niveles, lamentablemente”.

No obstante, siendo optimista, dijo que “en el contexto general, comparando con otras regiones similares, Rosario está llevando varios meses consecutivos de crecimiento en la facturación real y eso es positivo. Pero lo cierto es que cada vez más el fenómeno inflacionario empieza a golpear en el bolsillo de las familias y a nivel de las empresas”.

“En 2022, el nivel de actividad lo terminamos alrededor del 8,5%, un 50 o 60% arriba de lo que fue el indicador nacional”, finalizó.