El BCRA prende la aspiradora de pesos para frenar al dólar: habrá más recesión
La autoridad monetaria anunció que desdobla la licitación diaria de Leliq, el instrumento monetario con el que intenta “secar la plaza”. Tras el anuncio el dólar opera a la baja. El efecto sobre la economía será el de un escenario aún más recesivo, en plena campaña electoral.
El Banco Central anunció que a partir de este viernes realizará dos licitaciones diarias de Letras de Liquidez (Leliq) en vez de una, con el fin de absorber pesos del mercado y restarle presión al dólar.
Según la autoridad monetaria, estas Letras, a un plazo de siete días, se ofrecerán desde ahora «desdoblando en dos licitaciones, con el objetivo de mejorar la señal de política monetaria y calibrar con más precisión la liquidez del sistema».
El anuncio llega después de una jornada en la que la divisa norteamericana escaló por encima de los $43, marcando un nuevo récord histórico después de la última corrida salvaje de octubre pasado.
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Tras el nuevo acuerdo con el FMI, se estableció en el Banco Central un régimen de intervención estructurado sobre bandas cambiarias.
Esto quiere decir que mientras la divisa se mantenga entre esos márgenes (hoy la banda superior está levemente por encima de los $50 y la inferior alrededor de los $40) el BCRA no podrá intervenir fuertemente vendiendo o comprando divisas para controlar la cotización.
De este modo, la apertura de la primera licitación fue a las 11:30 y la segunda en el horario habitual de 14:15. En la primera oferta, la tasa promedio escaló al 56,76%, muy por encima del 51,86% de este jueves. Luego de la segunda se sabrá cuál es la tasa promedio total que corresponderá a la tasa de política monetaria.
En tanto, el monto indicativo diario de colocación fue de 185.000 millones de pesos, con un coeficiente pasivo 0,95 y activo 1,25, explicó el Banco Central, en un comunicado.
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Además, puntualizó que en cada licitación, cada agente podrá cargar hasta un máximo de tres posturas, cada una de ellas con un monto mínimo de 10 millones de pesos y sin máximo.
Luego de estos anuncios, el dólar perdió presión y operó a la baja. Cotizaba este mediodía con un
descenso de 61 centavos con relación al último cierre, y se ofrecía a un promedio de 40,81 pesos para la compra y 42,80 pesos para la venta, en bancos y casas de cambio.
Causa y consecuencia
El efecto de aumentar la tasa de referencia, que repercute sobre la tasa de Leliq, y el aumento a dos de las licitaciones de esas letras para seguir “secando la plaza”, tiene la clara intención de controlar el tipo de cambio, la obsesión del Gobierno luego de las corridas brutales de 2018, pero tendrá efectos en la economía real.
Lo cierto es que el Banco Central no tiene demasiadas opciones, ya que por el acuerdo con el FMI no está habilitado a vender más de 150 millones de dólares por día mientras la divisa no supere las bandas cambiarias. Al final del día el presidente de la entidad, Guido Sandleris, debe mandar planilla Washington detallando las operaciones del día.
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La contracara inmediata será la profundización de una recesión que ya es más extensa y grave de lo que el gobierno esperaba. Se multiplican a diario las noticias de despidos, suspensiones, cierres de fábricas.
La capacidad instalada de la industria está en niveles de 2002, lo que marca la intensidad del parate. Para colmo de males, la inflación, que el equipo económico del Gobierno esperaba bajar a raíz de la caída de consumo y poder adquisitivo, no bajará del 3% por lo menos hasta abril.