La caída del consumo es transversal a todos los sectores. Entre ellos, el lácteo que registró un descenso de producción del 14,5% durante el primer cuatrimestre del año, según los datos expresados en un informe del Observatorio de la Cadena Láctea Argentina (OCLA). Esta situación no se da en el resto del mundo, en donde la producción de leche creció un 0,68% en el mismo período analizado.

Ante este complejo panorama, el Gobierno decidió prolongar la suspensión de retenciones a las exportaciones de productos lácteos por un año más, según anticipó el director nacional de Lechería, Sebastián Alconada, durante el seminario internacional del sector realizado en la Sociedad Rural de Rafaela, provincia de Santa Fe.

La medida había sido impulsada durante la gestión de Alberto Fernández, y renovada en el comienzo de la administración de Javier Milei, al extenderla en enero por seis meses. Con la nueva prórroga, las exportaciones lácteas no pagarán impuestos hasta el 30 de junio de 2025, con lo cual acumulará un total de 20 meses sin ser alcanzados por el tributo.

En contraposición al mundo

En el promedio mundial, la producción de leche creció un 0,68% en los primeros cuatro meses del año. En Turquía y Bielorrusia se registraron los mayores avances, con subas del 8,5% y 8,2% respectivamente. El podio lo completó Australia con un incremento del 4,8%. El único país que acompañó a la Argentina en el registro negativo fue Nueva Zelanda, que tuvo un retroceso del 0,7%.

Desde OCLA indicaron que “se toma un grupo seleccionado de los principales países que representan alrededor del 55% de la producción mundial de leche de vaca, en el cual se puede observar un incremento de la producción del 0,68%, para el 1° cuatrimestre del año 2024 respecto a igual período del año 2023”.