El Senado dictaminó a favor del proyecto que beneficia a la industria del conocimiento

El Senado le dio dictamen al proyecto de ley de promoción de la denominada «industria del conocimiento» que establece reducciones e incentivos fiscales para empresas de software y actividades como el e-commerce y el marketplace, donde se inscribe la empresa Mercado Libre.

Sin debate, la iniciativa presentada este miércoles -que ya fue aprobada por la Cámara de Diputados y va camino a convertirse en ley- fue respaldada por todos los senadores presentes, aunque solo tomaron la palabra el radical Ángel Rozas, en nombre del oficialismo, y Rodolfo Urtubey, por el justicialismo.

Rozas expresó que esta iniciativa favorecerá la «generación de miles de puestos de trabajo», mientras que Urtubey indicó que como el país «no va a volver al período industrial de principios de siglo» podrá generar «valor agregado a través de este tipo de actividad económica».

El proyecto tiene como antecedente el Régimen de Promoción de la Industria del Software (Ley 25.922) y busca ampliar los beneficios de ese programa -que vence en diciembre próximo- y prorrogarlos hasta 2030.

La iniciativa amplía el espectro de actividades alcanzadas por esa ley (referida a la de creación y desarrollo de software) a «servicios informáticos y digitales» como el «desarrollo de productos de software que se apliquen a actividades como e- learning, marketing interactivo, e-commerce, servicios de provisión de aplicaciones», entre otros.

También agrega rubros, dado que además del software incluye a la producción audiovisual; biotecnología, biología, bioquímica, microbiología y afines; servicios geológicos; nanotecnología; y las industrias aeroespacial, satelital y nuclear.

Uno de los puntos clave del proyecto es el otorgamiento de «estabilidad fiscal» para las empresas que se inscriban en un registro especial, las cuales «no podrán ver aumentada su carga tributaria total nacional» mientras dure el régimen, a la vez que prevé una baja en el impuesto a las ganancias.

En este sentido, establece que esas empresas gozarán «por cada uno de sus trabajadores en relación de dependencia debidamente registrados de una detracción» equivalente a 17.509 pesos.

Como incentivo adicional, el proyecto fija un «bono de crédito fiscal transferible por única vez, equivalente a 1,6 veces el monto de las contribuciones patronales que corresponda pagar», el cual deberá ser aplicado «al pago de los importes a abonar» en carácter de anticipos o saldos de declaración jurada, en concepto de impuesto a las ganancias e IVA.

Además, cuando los trabajadores en relación de dependencia tengan título de doctor, ese bono de crédito fiscal será equivalente a «dos veces el monto de las contribuciones patronales correspondientes, por el término de 24 meses desde su contratación».

Por otro lado, las empresas quedarán alcanzadas por el impuesto a las ganancias en la alícuota reducida del 15% en la medida en que mantengan su nómina de personal y no serán sujetos pasibles de retenciones ni percepciones del IVA.

El proyecto avanza en el Senado en medio de la polémica que se generó por las críticas del dirigente social Juan Grabois a Mercado Libre debido a las ventajas impositivas de las que goza y a que, según dijo, tiene un «encuadre fraudulento» en la Ley 25.922.

No obstante, el proyecto que avanza en el Senado haría que esa empresa (una de las más grandes del país, con 237 millones de dólares de ganancia bruta) quede formalmente contemplada en las ventajas impositivas dado que pertenece a la categoría de e- commerce y de marketplace (plataforma para negocios de compra y venta virtual).

La polémica tuvo otro giro este miércoles, cuando trascendió que el trasfondo de la discusión entre Grabois, el Gobierno y Marcos Galperín, fundador y CEO de Mercado Libre, se debe a que el sistema Mercado Pago -la herramienta de pagos virtuales de la empresa digiral– comenzará a funcionar como billetera digital para abonar la asignación universal por hijo.