Milei reglamentó las Sociedades Anónimas Deportivas: ¿qué dice el decreto?
La medida fue formalizada a través del decreto 730/24, publicado este miércoles en el Boletín Oficial, y el ministro de Desregulación y Transformación del Estado, Federico Sturzenegger, se encargó de explicar sus alcances.
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El Gobierno reglamentó este miércoles la normativa que habilita que los clubes puedan ser privatizados a través del formato de sociedades anónimas deportivas (SAD) y volvió a desafiar a la Asociación de Fútbol Argentino (AFA), que mantiene como requisito ser una Asociación Civil sin fines de lucro para participar en sus competencias.
La medida fue formalizada a través del decreto 730/24, publicado este miércoles en el Boletín Oficial, y el ministro de Desregulación y Transformación del Estado, Federico Sturzenegger, se encargó de explicar sus alcances.
El decreto reglamenta las condiciones bajo las cuales los clubes podrán transformarse en sociedades anónimas deportivas o participar en figuras de este tipo, pero también determina un plazo para que las federaciones -léase la AFA- adecuen sus estatutos a la ley.
«Los cambios introducidos por el presidente Javier Milei solo apuntan a dar mayor libertad a los socios. El club es de ellos, pero a partir de ahora podrán elegir con mayor libertad cómo organizar su club. Nadie impone nada, solo se amplían libertades. Esto aplica a todos los deportes», indicó Sturzenegger, a través de su perfil de la red social X.
La Asociación del Fútbol Argentino había ratificado en julio pasado su rechazo a la obligación de asociar entidades que tengan diferente estructura jurídica a la de sus actuales miembros, ya que se contrapondría con sus estatutos.
«Ni AFA ni sus entidades miembros se encuentran en oposición a las llamadas SAD ni a que cada asociación civil pueda decidir libremente la estructura jurídica a adoptar. Ahora bien, sí se oponen -puesto que es palmariamente inconstitucional- a que se quiera obligar a cualquier ente privado (la AFA y cualquier asociación civil, lo son) a asociar entidades con diferente estructura jurídica a la de sus actuales miembros, en clara oposición a sus estatutos conforme así lo establecieron sus socios», afirmó la institución en aquel comunicado.
Ahora el Gobierno nacional arremetió nuevamente contra esta postura y fijó un plazo de un año para que los estatutos puedan ser modificados a los fines de despejar el camino de todo club que decida reconvertirse en una SAD.
Además, en el artículo 2 del decreto publicado este martes, el Ejecutivo asienta que «las organizaciones integrantes del Sistema Institucional del Deporte y la Actividad Física que modifiquen o hubieran modificado su estructura jurídica tendrán derecho a mantener su participación en toda competición en la que intervinieran bajo su estructura jurídica anterior, con las mismas condiciones que se encontraban con anterioridad a la modificación producida».
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Sturzenegger planteó que los cambios introducidos por el presidente Javier Milei apuntan a generar «mayor transparencia» y permitir una plataforma legal «que sea compatible con la inyección de capital en la actividad». Para el funcionario, si hay mayor inversión, mejorará la calidad de los deportes, a pesar de que ese esquema no es verdaderamente correlativo, tal lo demuestran otras tantas ligas del mundo que cuentan con recursos multimillonarios y competiciones de menor peso.
Claudio Tapia no quiere saber nada con las SAD.
«Para incorporar capitales, un club no necesita íntegramente convertir su forma societaria -aclaró el ministro de Desregulación-, puede hacerlo solo con un deporte en particular (fútbol, digamos) donde la asociación civil es accionista beneficiaria de la rama que maneja ese deporte y que recibe capitales privados. El esquema de participación y asociación lo eligen los socios si lo estiman conveniente».
Respecto a la controversia que el Gobierno mantiene con la AFA por las disposiciones marcadas en los estatutos, Sturzenegger insistió en que «las federaciones tienen que adecuarlos para que no sean contrarios a la ley y tienen un año a partir de este miércoles».
«El cumplimiento de la ley no es opcional, pero independientemente de que hayan adecuado o no sus estatutos, la normativa es clara: los clubes pueden elegir la forma societaria en la que quieren operar. Esto no depende del estatuto de la federación porque lo dice la ley», aseveró el funcionario.
En el cierre de su comunicado, Sturzenegger confrontó directamente con la entidad que conduce Claudio «Chiqui» Tapia y le adjudicó tener miedo ante la posibilidad de que los socios «elijan con mayor libertad cómo organizarse».
«¿Por qué tienen de que entren capitales al fútbol? ¿Tienen miedo de que con clubes más fuertes no podrán dominarlos? ¿Temen que con mecanismos de gestión más transparentes aumente el poder de los clubes en detrimento de la AFA?», concluyó el titular del Ministerio de Desregulación.
