Silvia Saravia: «Otro campo es posible, con soberanía alimentaria y con trabajo»

Conclusión Buenos Aires – Aldo Battisacco

La dirigente nacional de Libres del Sur, Silvia Saravia, se refirió a la actividad que se llevará adelante mañana: «En el marco de la campaña ‘La peor violencia es el hambre’, que encabeza Adolfo Pérez Esquivel, plantearemos que existe un campo alternativo al modelo extractivista y devastador de Milei. Hay otra posibilidad, otras formas de que la comunidad pueda acceder a la alimentación saludable».

Saravia sostuvo que «hay otro modelo de país posible: el que plantea la soberanía alimentaria y la recuperación del trabajo. En ese modelo, se agrega valor en origen para el desarrollo de nuestro país de una manera más equitativa y sustentable».

En estos 40 años de democracia numerosas son las asignaturas pendientes, entre ellas los altísimos niveles de pobreza e indigencia de la sociedad, sin embargo, el DNU 70 hoy vigente y la ley Bases propuesta por el gobierno de Milei y avalada por una bochornosa mayoría parlamentaria están destruyendo el conjunto de políticas publicas que brindaban un piso mínimo de dignidad y asistencia a los sectores populares y a las victimas de violencia de distintas formas de violencia.

El titular del Servicio Paz y Justicia y Premio Nobel de la Paz, Adolfo Pérez Esquivel, convocó desde Plaza de Mayo a un llamamiento nacional para denunciar el hambre producto del brutal ajuste y especulación financiera del gobierno de Javier Milei.

Los datos publicados recientemente por el ODSA – UCA dan cuenta del acelerado deterioro de las condiciones de vida de nuestra población. El informe muestra que la inseguridad alimentaria en áreas urbanas alcanza al 24,7% de las personas, al 20,8% de los hogares y al 32,2% de los niños, niñas y adolescentes.

El lunes 8 de julio el Premio Nobel de la Paz, Adolfo Pérez Esquivel, titular del SERPAJ – Servicio de Paz y Justicia -,convocó a Plaza de Mayo bajo la consigna «La peor violencia es el hambre»

El informe muestra que la inseguridad alimentaria en áreas urbanas alcanza al 24,7% de las personas, al 20,8% de los hogares y al 32,2% de los niños, niñas y adolescentes

La imposibilidad de acceder a la comida necesaria, particularmente en los sectores más vulnerables como las niñeces y los adultos mayores es responsabilidad directa de la Ministra Pettovello.

La iniciativa contó con la presencia de diversas organizaciones sindicales, sociales, de DD.HH., asambleas, pastorales sociales y curas de la opción por los pobres.

En la conferencia de prensa se presentó un documento en la Casa de Gobierno, en el mismo se exige al Congreso que declare de manera urgente la emergencia alimentaria en el marco de la soberanía alimentaria, al Poder Ejecutivo que cumpla con garantizar todos los derechos que le corresponden y a la Corte Suprema de Justicia que provea los mecanismos necesarios para que el derecho humano a la alimentación se efectivice.

«El llamamiento surge de las necesidades que está viviendo el pueblo en muchos sectores del país, de desnutrición, pobreza y hambre», señaló Adolfo Pérez Esquivel.

Adolfo Pérez Esquivel – Premio Nobel de la Paz

“No es posible que en nuestro país, productor de alimentos, haya niños, niñas, jubiladxs sufriendo hambre. Sumado a esto, el incremento de los despidos producto de la suspensión de obras públicas, el cierre de programas del Estado como el ProHuerta, el programa de la Agricultura Familiar, el alimento de los pueblos originarios y de muchos comedores comunitarios, así como el cierre de fábricas y pymes, que se ven agobiadas por políticas que no sólo no las protegen, sino que, muy por el contrario, alientan la concentración de la riqueza en unos pocos, que hace que la situación lleve al aumento de la pobreza, la indigencia y el hambre, y a muchas familias, que tengan que vivir en la calle, lo que provoca el aumento de las enfermedades físicas y psicológicas».

En el mismo sentido manifestó que «la falta de respuestas del Estado induce al incremento y dependencia a las drogas con graves consecuencias para la población, y muy en particular afecta a lxs jóvenes”, remarcó.

“El gobierno se niega a distribuir las miles de toneladas de alimentos que guarda en galpones, diciendo que son para emergencia de catástrofes. Lo cierto es que el país atraviesa la catástrofe del hambre y aún así se niega a distribuirlos a los comedores comunitarios y a organizaciones solidarias. Los alimentos son del pueblo y no del gobierno”, aseveró, en otro fragmento, Pérez Esquivel.