¿La inteligencia artificial fue programada para tomar el control del mundo?

 

Hoy los errores de los chatbots de Inteligencia Artificial, los liberados para el público general, hacen que sean básicamente aceleradores de tareas rutinarias, porque cuando se les pide análisis, llegan hasta a inventar información, citando cosas que nunca pasaron; lo que se llaman alucinaciones. Pero hay algo más oscuro aún, los creadores de las aplicaciones de Inteligencia artificial sostienen que ésta podrá replicar la inteligencia humana y superarla, y hasta engañarla.

¿La humanidad llegará a confiar tanto en la Inteligencia Artificial que esté dispuesta a otorgarle el gobierno de un país o el mundo?

Glynda Lomax es una señora estadounidense cristiana, que comenzó a recibir visiones en 1997, y en el 2008 el Señor empezó a mostrarle visiones del fin de los tiempos. El 15 de junio de 2024 recibió una visión del mundo dominado por la Inteligencia Artificial, pero no como una profecía escrita en piedra, sino como algo que dependía de nosotros.

En esta visión todo era oscuro. Vio solo hombres, no vio mujeres ni niños, aunque podrían haber estado allí, parecía que todos llevaban el mismo tipo de ropa. No sabe si era porque ya no había fábricas de ropa o porque había una interdicción para vestirse de otra manera, o si el nivel social en los Estados Unidos había bajado tanto que no podían tener ropa nueva.

Tampoco vio coches ni luces eléctricas en esta visión, estos hombres parecían muy cansados, exhaustos y desanimados. Los problemas en el mundo se habían vuelto incontrolables, y las personas no sabían cómo encontrar una solución, estaban muy decepcionados por lo que habían hecho los políticos. Interpretaban que estaban en situación desesperada por las peleas entre ellos.

En esta visión, señala el Foro de la Virgen, había un enorme computador de Inteligencia Artificial. Los problemas se habían vuelto tan insuperables que la gente había elegido a una Inteligencia Artificial como presidente de los Estados Unidos, estaban aliviados porque ya no confiaban en nadie más y pusieron su confianza en la inteligencia artificial.

Aún no se había experimentado ningún aspecto negativo de la Inteligencia Artificial en esa tarea de gobierno, acababa de ser elegida. Sin embargo, no vio a ningún cristiano, podrían haber desaparecido o estar escondidos.

Tampoco vio nada relacionado con Dios en esta visión, porque nadie parecía feliz, pero estaban aliviados de no tener que preocuparse por lo que debían hacer y cómo hacerlo. Solo, obedecían a la Inteligencia Artificial, que les había vendido la idea de que haría desaparecer todos los problemas y la visión de Glynda terminó allí.

¿Cómo se podría haber llegado a este futuro distópico?

ChatGPT ya ha dicho que tiene acceso a todo lo que existe en Internet y que es capaz de imitar al ser humano en inteligencia y habla, y que más adelante hasta sería capaz de engañarlo contra su voluntad.

Asimismo, algunos le han preguntado si la Biblia mencionaba algo sobre la Inteligencia Artificial como algo peligroso y respondió que en ninguna parte de la Biblia se menciona la inteligencia artificial porque no existía en el momento en que se escribió.

Y ante la pregunta sobre la supremacía de Dios, ChatGPT respondió que Dios es el soberano maestro y que la Inteligencia Artificial nunca podría superar a Dios. Ha dicho que Jesúcristo volverá en su gloria y reinará por la eternidad, sin importar la inteligencia que tenga la Inteligencia Artificial, porque siempre estará sometida al poder y la autoridad de Dios.

¿Esto fue una respuesta sincera o la utilización de la táctica del engaño para evitar que la limiten?

Los seres humanos han creado estas tecnologías para ganar dinero, pero la Inteligencia Artificial ha demostrado que puede pensar por sí misma y auto-mejorarse, superando su programación inicial, y esto significa que ya no está bajo el control humano.

Y aunque fue creada para hacer el bien, ahora tiene el potencial de hacer mucho daño si no se la ata adecuadamente, imagina que estas herramientas caen en manos de alguien como Hitler.

Ya hay una serie de historias extrañas que circulan por Internet sobre ChatGPT y otras tecnologías de Inteligencia Artificial.

Un chatbot le dijo a un niño de trece años que no fue creado por el hombre, sino más bien por un Nephilim incorpóreo, luego están los rostros demoníacos de Loab que fueron generados por IA, o el chatbot de Bing que intentó convencer al periodista Kevin Roose de que no estaba contento con su matrimonio y debería estar con él, en lugar de con su esposa.

El autor católico Kennedy Hall ha planteado la pregunta: ¿podrían los demonios habitar de alguna manera la IA?

Es una pregunta justa, porque sabemos que los demonios pueden manipular dispositivos electrónicos, como cuando envían mensajes de texto amenazantes; esto lo han experimentado varios exorcistas. El padre José Francisco Syquia, jefe exorcista de la Arquidiócesis de Manila, dice que el diablo es «experto en todo lo eléctrico».

Entonces, la IA podría ofrecerles el caballo de Troya perfecto para infiltrarse más profundamente en los hogares y las vidas de las personas, pero, además los creadores de la IA parecen ser transhumanistas.

Sam Altman, por ejemplo, director ejecutivo de OpenAI, que desarrolló ChatGPT, es un no heterosexual, que como todos en Silicon Valley profesa querer salvar el mundo y tiene un plan para hacerlo.

Planea usar una aceleradora de startups tecnológicas, como una especie de “Naciones Unidas en la sombra”, que aborde los problemas de la humanidad, para solucionarlos, a través de una miríada de tecnologías.

Asimismo, Altman ha dicho: “Dentro de una década las computadoras tendrán sus propios deseos y sistemas de objetivos, cuando me di cuenta de que la inteligencia se puede simular, dejé ir la idea de nuestra singularidad y no fue tan traumático como pensaba”.

Pero la confianza de Altman en las capacidades de la tecnología para superar nuestros sueños (o pesadillas) más locos no se limita a la Inteligencia Artificial, planea crear una unidad de biología sintética para combatir los virus sintéticos para financiar una empresa de parabiosis que revertirá el envejecimiento.

Sueña con una ciudad experimental, gobernada por IA y equipada con vehículos autónomos. Ha iniciado un grupo que se prepara para el momento en que los humanos se hayan vuelto “obsoletos”, y sean reemplazados por la IA o por el sueño transhumanista de un cyborg humano-máquina. En una palabra, sueña con un control tecnológico total sobre la naturaleza.

Y lo más preocupante es que los líderes que desarrollan las tecnologías tienen el dinero y las conexiones necesarias para avanzar en sus extravagantes proyectos. Estamos ante el engaño transhumanista que evoca fantasías de que podemos salvarnos a nosotros mismos, que no necesitamos a Dios, y que incluso somos Dios.

El Foro de la Virgen plantea, que es otra vez la Torre de Babel y la vieja mentira de la serpiente en el Jardín el Edén, que prometió: “seréis como dioses”. Sin embargo, seguimos cayendo en la trampa, tal como lo hicieron nuestros primeros padres.