Tiempos apocalípticos: última revelación de Dios ante la Gran Guerra
La Virgen ha venido a decirnos que debemos volver a su Hijo. Mientras el mundo está siendo arrastrado por la ideología anticristiana. Sabemos que la última batalla entre el bien y el mal será sobre la familia, como dijo la Hermana Lucía de Fátima.
- Religión y espiritualidad
- Sep 30, 2024
Estamos en tiempos apocalípticos, como lo han profetizado tantos santos y místicos desde hace siglos. Y no es una coincidencia que haya habido tantas apariciones marcianas en los últimos 150 años, para prepararnos a lo que viene.
La Virgen ha venido a decirnos que debemos volver a su Hijo.
Mientras el mundo está siendo arrastrado por la ideología anticristiana, sabemos que la última batalla entre el bien y el mal será sobre la familia, como dijo la Hermana Lucía de Fátima. Y estamos en medio de esa batalla moral ahora mismo.
Pero esto se materializará en una guerra que enfrentará a dos grupos que aspiran a tomar el poder, azuzados por el maligno; dos caras de la misma moneda.
¿Y qué deben hacer los cristianos ante esta situación? ¿Cómo deberían prepararse?
Según las últimas instrucciones que recibió el padre Michel Rodrigué, y comunicó a Xavier Reyes Ayral a finales de septiembre de 2024, hoy nadie escapa a esta situación bélica para consolidar esta toma de poder del mundo por el maligno.
Estamos viendo cómo las tensiones entre Israel y las naciones árabes vecinas están aumentando más y más.
Luego tenemos a Rusia y la OTAN y migraciones masivas de musulmanes a Europa y conflictos civiles.
Si me hubieran dicho hace 25 años, que 25 años después, estaríamos al borde de una tercera guerra mundial con Rusia debido a Ucrania, y que la Iglesia Católica se habría convertido en lo que es hoy, me habría reído. Pero lo cierto es que llegó.
Y el Padre Michel Rodrigue nos dice cómo prepararnos. No es un mensaje de miedo, sino un llamado a la conversión, a la esperanza, y a la confianza en la Providencia Divina.
Dios Padre le dijo: “Todo ha sido dicho ya. Ahora, todos tienen todas las fórmulas y recetas para tomar las medidas necesarias y prepararse para lo que está por venir”.
Ha solicitado que los fieles oren mucho por el Líbano, que va a pasar por una tremenda prueba.
Que continúen rezando por Europa, particularmente por Francia e Inglaterra. Y también por la situación en el Medio Oriente, que va a empeorar y se va a volver crítica el próximo año.
Esta guerra que se está armando es entre la OTAN y una alianza entre Corea del Norte, Rusia, China e Irán.
Ya es una guerra mundial entre dos grandes alianzas de este mundo, que están en una lucha de poder. Dos caras de la misma moneda.
Dios Padre le ha dicho al Padre Michel: “Diles a mis hijos que no caigan en la trampa de Satanás, que es perderse en el miedo, la angustia, el enojo o la condenación, sino que permanezcan en paz y se abandonen incondicionalmente a los pies de mi cruz”.
Porque ese será el camino a la salvación, tanto espiritual como física.
De modo que el mensaje es abandonarnos lo mejor posible a los pies de la cruz.
Orar, confesarnos mensualmente, recibir la comunión todos los domingos, rezar el Rosario todos los días, confiar.
Consagrarnos al Sagrado Corazón de Jesús y al Inmaculado Corazón de María; consagrar nuestros hogares.
¿Qué va a hacer Dios al respecto?
Justo antes de que haya un caos total, como un Armagedón, Dios intervendrá antes de que aniquilemos todo el planeta con ojivas nucleares por todas partes.
Aunque la destrucción será superior a la de la Primera y Segunda Guerra Mundial combinadas.
¿Y cómo se desarrollará el proceso?
Cuando Francia sea parcialmente invadida por los rusos y con disturbios de los musulmanes, será un punto central.
Los aliados de Francia no vendrán a su rescate. Los estadounidenses no acudirán como lo hicieron en la Primera y Segunda Guerra Mundial.
Hace años, al Padre Michel se le permitió ver una visión de un ataque a EE.UU.
Pudo ver líneas de humo viniendo del norte de Rusia, pasando sobre el Polo Norte, a través de Canadá.
Y luego la mano divina empujando la gran mayoría de esas armas balísticas fuera de su camino, salvo siete ciudades que parecían haber sido alcanzadas.
Y luego, la voz de Dios Padre le dijo que la preservación de los Estados Unidos se debía a que buena cantidad de norteamericanos rezaba la Coronilla de la Divina Misericordia.
Dios enviará el Aviso o iluminación de Conciencia en medio del conflicto militar en Europa.
Será justo cuando los dedos estén a punto de presionar los botones, que Dios se manifieste a través del Aviso, ya que no tolerará que su creación sea destruida por manos de los hombres.
En el peor de los momentos de este conflicto, Dios intervendrá.
¿Y cómo será el Aviso?
Todos verán el estado de sus almas, no tendrán dudas sobre la realidad de Dios y la existencia de su Hijo, y la credibilidad de la Iglesia Católica.
Todos sabrán dónde terminarían si murieran en ese momento.
Habrá conversiones masivas porque por 42 días el diablo estará literalmente atado.
Después de eso, será liberado, y entonces será el momento en que el anticristo se dará a conocer.
La guerra entonces tomará dimensiones completamente diferentes.
Los que sean necesarios habrán sido llamados a ir a los refugios, mediante la manifestación de sus ángeles guardianes.
Cuando estemos en el refugio de nuestro hogar o en el refugio permanente que se nos ha dado, será el tiempo de la gran persecución.
Esos refugios permanentes deben tener al menos una fuente de agua potable, como un pozo o alguna otra fuente.
Aquellos que sean asignados al refugio aparecerán con una cruz de luz en la frente, que será reconocida tanto por el ángel como por quienes desarrollaron el refugio.
Los ojos de los paganos, los incrédulos y los enemigos de Dios no podrán ver esos refugios.
Para ellos, se volverán completamente invisibles.
Es posible que en algunos de esos refugios, donde estaremos aproximadamente tres años y medio, que los suministros se acaben.
Sin embargo, Dios dijo que, bajo circunstancias extraordinarias, se otorgarán a los fieles que confíen en los mensajes de Dios muchos milagros de multiplicación.
Cuando haya escasez de provisiones, como comida, agua, o medicamentos, habrá multiplicación. Dios nos proveerá de maneras extraordinarias.
Estas han sido las instrucciones para permanecer a salvo en el momento de la posible Guerra Mundial y la persecución que se avecina.