Aparte de la guerra nuclear, la revolución digital es el mayor desastre de la humanidad

Desde el principio tuve claro que la revolución digital era una catástrofe masiva en ciernes. La revolución digital es una catástrofe en todos los ámbitos. No sólo otorga al gobierno la capacidad de imponer una tiranía más allá de la imaginación de George Orwells, sino que somete todo el conocimiento acumulado a la eliminación mediante un pulso electromagnético y provoca el cierre de la actividad económica mundial debido a un error en el software de ciberseguridad.

Probamos esto el viernes pasado. En todo el mundo se detuvieron los vuelos. La gente no podía acceder a sus cuentas bancarias. Las tiendas no podían procesar transacciones. La gente no podía comprar comida ni ropa. No se pudo contactar con la policía de emergencia, los servicios de salud y los bomberos. Todo esto y más sucedió porque una actualización de ciberseguridad de Crowdstrike contenía un error que cerraba los servicios que dependían del sistema operativo de Microsoft.

Pregúntense por qué los humanos, si son realmente inteligentes, cosa que a menudo dudo, construirían e impondrían un sistema de comunicación tan frágil y fácilmente perturbable. En mi opinión, la revolución digital es obra de personas con visión y capacidad insuficientes para comprender las fragilidades obvias del sistema digital poco confiable y fácilmente comprometido del que dependemos.

No existe la ciberseguridad. Una persona tiene que ser ciega, sorda y muda para no saber esto. La información de que esto es así nos llega todos los días. AT&T anuncia una falla total en su seguridad y que toda la información de sus clientes ha sido robada.

Escuchamos lo mismo de muchas corporaciones. Las ciudades y los servicios públicos son retenidos por los ciberdelincuentes que se apoderan de sus sistemas. Etcétera. El alguna vez orgulloso pueblo estadounidense se ha visto obligado a someterse al espionaje de un gobierno tiránico, a tener cero privacidad, a ser susceptibles al robo de nuestra identidad, nuestras cuentas bancarias, nuestras cuentas de inversión, a ser susceptibles a que el FBI implante pornografía infantil en nuestras computadoras o cualquier evidencia contra nosotros que quieran implantar.

Si la información acumulada almacenada en la nube no está protegida por una jaula de Faraday, puede ser eliminada por una fuerza electromagnética. El propio Sol, si se vuelve loco, puede emitir fuerzas electromagnéticas suficientes para borrar la información digital. Una guerra nuclear eliminaría toda la información almacenada en la nube. Los supervivientes, si los hubiera, no sabrían nada. Volverían a la época de los cavernícolas.

La revolución digital ha permitido todos los males imaginables. A cambio, los imbéciles pueden desplazarse por sus teléfonos móviles en busca de entretenimiento. Nos preocupa el “calentamiento global”. Nos preocupa la promesa de Bill Gates de una década de pandemias. Nos preocupa que Trump nos venda a Rusia. Deberíamos preocuparnos de que la revolución digital acabe con una existencia funcional para la humanidad.

Un apagón cibernético perturba el mundo

El 19 de julio de 2024, «una importante interrupción cibernética global parece estar afectando a las empresas, los aeropuertos y los servicios gubernamentales en todo el mundo. Todos los vuelos de varias de las principales aerolíneas estadounidenses fueron suspendidos debido a un problema de comunicación, dice la Administración Federal de Aviación». Microsoft dice que está investigando un problema que impide a los usuarios acceder a sus aplicaciones y servicios”.

Es la pérdida mundial de la capacidad de funcionar. Un error de una firma de ciberseguridad provocó una falla en el funcionamiento del sistema mundial de comunicaciones.

“Fue un ejemplo sorprendente de la frágil dependencia que tiene la economía global de cierto software y el efecto en cascada que puede tener cuando las cosas van mal. La interrupción se atribuyó a CrowdStrike, una empresa de ciberseguridad cuyo software es utilizado por decenas de industrias en todo el mundo para protegerse contra piratas informáticos y violaciones externas. Una actualización de software emitida por CrowdStrike parecía ser la raíz del problema, lo que provocó fallos en las máquinas que ejecutaban el sistema operativo Microsoft Windows”.

Así es como se sintieron los efectos colaterales en todo el mundo:

• “Vuelos interrumpidos: las aerolíneas estadounidenses informaron de importantes interrupciones en todo el país durante la noche, con muchos pasajeros varados, aunque algunas aerolíneas parecían estar recuperándose el viernes por la mañana. Al menos cinco aerolíneas estadounidenses (Allegiant Air, American, Delta, Spirit y United) habían suspendido todos sus vuelos por un tiempo, según la Administración Federal de Aviación.
• “Caos en los aeropuertos: Los problemas también se sintieron en los aeropuertos de todo el mundo, incluidos Hong Kong, Sydney, Berlín y Amsterdam. En el aeropuerto británico de Manchester se formaron largas colas en la zona de salidas, ya que muchas máquinas en los mostradores de facturación no funcionaban. Ryanair, una de las aerolíneas más grandes de Europa, dijo que estaba experimentando interrupciones debido a una interrupción de TI de un tercero que está «completamente fuera de nuestro control».
• “Cortes del 911: En los EE. UU., el corte parecía estar afectando las líneas de emergencia del 911 en varios estados, dijo el Sistema de Alerta de Emergencia de los EE. UU. en las redes sociales. Dijo que las personas que experimentan emergencias deben llamar al número de la policía local o al departamento de bomberos. La mayoría, si no todos, los problemas parecían resolverse por sí solos a media mañana.
• “Problemas de transmisión: Muchas emisoras de televisión internacionales también informaron de problemas. En Francia, TF1 y Canal+, entre los más vistos, dijeron en mensajes en X que no podían salir al aire. «Estamos todos en el escenario, pero hay una avería gigantesca en la sala de control» que hace imposible la transmisión en vivo, escribió en X Christophe Beaugrand-Guerrin, presentador de TF1.

Las personas que nos trajeron la revolución digital y ahora nos traen la inteligencia artificial son las personas más estúpidas que jamás hayan existido. Son estúpidos porque no pueden comprender las consecuencias involuntarias de lo que están haciendo.

Trump, Rusia, China e Irán no son nuestros enemigos. Nuestros enemigos son los nerds que están trabajando con todo su corazón para darle poder a la inteligencia artificial sobre los humanos. La acumulación del mal total, conocida como transhumanismo, está trabajando para crear un robot con inteligencia artificial que reemplace a un ser humano.

El valor para un estado policial de un robot con Inteligencia Artificial en comparación con un humano es que el robot no tiene moralidad ni comprensión de la diferencia entre hecho y realidad. El robot de IA responde únicamente a su programación. La verdad no es reconocida por un robot cuya realidad es una realidad programada y puede ser muy diferente de la verdad real.