Un hombre pasó una semana secuestrado detrás de un ropero
Fue secuestrado en la ciudad bonaerense de Florencio Varela por una banda que lo mantuvo encadenado. Fue liberado tras el pago de un rescate de 230.000 pesos.
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- Sep 20, 2016
Un hombre de 60 años estuvo secuestrado durante siete días con un pie encadenado detrás de un ropero hasta que fue liberado en el partido bonaerense de Almirante Brown, tras el pago de un rescate de 230 mil pesos.
El hombre fue secuestrado en la ciudad bonaerense de Florencio Varela por una banda que lo tuvo cautivo una semana en una casa, con un pie encadenado, hasta que fue liberado luego de que su ex mujer vendiera una camioneta y pagara 230.000 pesos como rescate.
Si bien el hecho se conoció en las últimas horas, el caso duró una semana hasta el sábado último, cuando la víctima apareció en la localidad de Longchamps, partido de Almirante Brown.
Los investigadores creen que no se trató de un secuestro extorsivo común, no sólo por lo prolongado del cautiverio, sino también por otras cuestiones, por lo que se investigaban varias hipótesis, entre ellas que los delincuentes se hubieran equivocado de víctima.
Todo comenzó el 10 de este mes por la noche cuando la víctima, identificada como Alfredo José Miranda, de 60 años, contratista de la construcción y fletes, circulaba con su camioneta Toyota Hilux rumbo a una fiesta de la comunidad boliviana en el denominado barrio Kilómetro 26, frente a la estación Dante Ardigó del ex Ferrocarril Roca, en el partido de Florencio Varela.
Según contó luego en la fiscalía y a los detectives de la Delegación Departamental de Investigaciones (DDI) Quilmes que trabajan en su caso, Miranda fue bajado de su camioneta, traspasado a un auto que podría ser un Renault Laguna y llevado vendado a un sitio de cautiverio.
«Le dijeron que sabían que tenía varios camiones y eso no es cierto. No descartamos que se hayan equivocado de víctima y pensado que era un feriante y comerciante de fruta y verdura», dijo una fuente judicial.
Miranda contó que lo tuvieron los siete días que duró el secuestro tirado en el piso, detrás de un ropero y con un pie encadenado, según señaló otro de los investigadores.
Los captores se comunicaron con la familia de la víctima y exigieron un rescate de medio millón de pesos por su liberación.
Miranda les explicó a los secuestradores que era imposible para su entorno reunir ese dinero y que lo único que tenía de valor era la camioneta.
Los delincuentes decidieron devolver a la familia la camioneta de la propia víctima para que la vendieran y así obtener el dinero de la venta como rescate.
Según las fuentes, los secuestradores dejaron abandonada la 4X4 en el Parque Pereyra Iraola de Berazategui y llamaron para reportar su ubicación.
Como el vehículo estaba a nombre de la ex mujer del contratista, fue ella quien concretó la venta de la Toyota Hilux por 230.000 pesos que se utilizaron para pagar el rescate.
El pago se concretó el sábado por la noche en el denominado barrio «Pepsi», ubicado sobre la ruta 36, en el partido de Florencio Varela.
Luego de cobrar el rescate, los delincuentes subieron a Miranda a un auto, para luego liberarlo en la localidad bonaerense de Longchamps, partido de Almirante Brown, donde caminó hasta una remisería para regresar a su casa en Florencio Varela.
Fuentes de la investigación señalaron que Miranda fue revisado por médicos y psicólogos, quienes reportaron que a pesar de los siete días de cautiverio estaba en muy buen estado emocional y de salud y que presentaba buenas condiciones de alimentación y de aseo.
«Estamos investigando todas las hipótesis. Nos centramos en las actividades y relaciones de la propia víctima para ver si tiene deudas, enemigos o algún problema que haya motivado este secuestro», dijo otro de los pesquisas.
«Tampoco descartamos que se hayan equivocado de víctima y que la idea original de la banda hubiera sido secuestrar a algún quintero productor de verduras y feriante de la zona», señaló un vocero judicial.
A nivel judicial, el caso es investigado por la Fiscalía Federal de Quilmes, a cargo de la fiscal Silvia Cavallo, y que está siendo subrogada por su secretario, Adrián Rigonatto.
Desde la fiscalía pusieron a trabajar en forma conjunta a detectives antisecuestros de las dos fuerzas policiales: la DDI Quilmes y la División Operativa Sur (ex Antisecuestros) de la Policía Federal Argentina (PFA).